Antonio Álamo

Antonio Álamo


Lapsus

02/02/2023

Lapsus, según apunta la RAE, es una falta o equivocación cometida por descuido y pocas personas se libran de su existencia. O ninguna. El último ejemplo lo ofreció el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, tal como recogieron en directo las televisiones anteayer martes, cuando ofrecieron sus conexiones con el Senado para retransmitir la sesión de control al Gobierno. El político gallego aludió a la mediocridad de los ministros y dijo -por duplicado, ya que lo repitió- que el presidente Sánchez se había visto obligado a cesar a 40 ministros en 40 años. Fue un descuido tonto o una traición del subconsciente, no hay que olvidar que estamos en España, que corrigió velozmente pero no pudo evitar que las risas en la zona gubernamental, llamémosla así, fueran sonoras. El error, más divertido y comprensible que imperdonable, evitó que esta columna abordara la reparación del puente ferroviario entre Quintana del Puente y Villodrigo, obra sobre la que este periódico ofrecía información. Todo sea por el entretenimiento que muestra la política española porque no hay día, sea por unas razones u otras, que resulte aburrido. Por suerte, la repercusión social de este lapsus contribuye a tranquilizar un poco a la sociedad porque deja entrever que nuestros representantes, quienes gestionan nuestros impuestos, están al día de todo lo que acaece en España, incluso en el ámbito lingüístico. Que son más ilustrados que los de antes, vamos. Lo corrobora el uso del verbo cesar en lugar del verbo destituir. Tradicionalmente el verbo cesar era solo intransitivo y ahora, hace no mucho, los miembros de la Academia decidieron que debía aceptarse también una cuarta acepción transitiva que valida frases como la pronunciada por Núñez Feijóo y que tantas risas provocó entre sus oponentes. También hubiera podido usar deponer. O despedir. Da igual aunque ya puestos… ¿qué hacemos, pues, con aquello de «si esto era la moderación pues para este viaje no hacía falta tanta forja», que soltó la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno? Ustedes dirán si es oportuno solicitar a la RAE que equipare forjas y alforjas. Mientras tanto, mientras lo meditan, sí podríamos actualizar por nuestra cuenta el refranero español.