La Junta de Gobierno de la Diputación de Palencia aprobó hoy un nuevo protocolo, en colaboración con el Ejecutivo autonómico, para promover el establecimiento de sistemas de depuración de aguas residuales en la provincia. El documento tiene como objetivo priorizar a poblaciones de 500 a 2.000 habitantes equivalentes, ejecutando las infraestructuras precisas y garantizando su correcto mantenimiento y explotación.

De esa forma, el protocolo establece como ámbito de colaboración la elaboración de un documento de análisis de la situación de la depuración en los municipios, el cual se redactará por parte de la Junta de Castilla y León. Dicho análisis tendrá en cuenta también el estado de los municipios con población menor de 500 habitantes equivalentes, con objeto de estudiar las fórmulas más adecuadas pare acometer la depuración de sus aguas, así como el correcto seguimiento de la correcta explotación de las infraestructuras.

Ambas administraciones deberán garantizar la voluntad de facilitar los medios materiales y humanos, así como formar a un equipo de trabajo provincial que tendrá como finalidad la coordinación para la interpretación del protocolo y concluir en la elaboración de acuerdos con los beneficiarios últimos de las futuras inversiones. 

En ese sentido, la presidenta de la institución provincial, Ángeles Armisen, afirmó que, hasta la fecha, es un "acuerdo programático, pero que se prevé tener un convenio con partida económica asignada a cada provincia”. Además, ha señaló que “dicho programa se coordinará con el propio gestionado por Diputación de Palencia, el Programa de apoyo de al ciclo municipal del agua (CIMA), que previsiblemente verá incrementado el número de municipios beneficiados”.