Hace dos años, también un 15 de junio, comenzó la andadura del equipo de Gobierno del Partido Popular y Ciudadanos, y, con ello, un mandato que hoy llega a su ecuador. Veinticuatro meses que, más allá del balance político realizado por PP y Ciudadanos en estos últimos días, han estado marcados por una caída de la inversión por habitante de casi un 50%, concretamente del 48,4 por ciento, tal y como se recoge en los indicadores presupuestarios que publica el Consistorio en la web municipal.

El último presupuesto firmado por el anterior equipo de Gobierno, el de 2018, se cerró con una inversión por habitante en la ciudad de 67,09 euros. Este dato se obtiene de dividir las obligaciones reconocidas netas de los capítulos 6 y 7 del presupuesto, las que se refieren a las inversiones reales y las transferencias de capital realizadas durante el ejercicio, entre el número de habitantes del municipio: 78.412 en 2019 y 78.144, en 2020.

Es cierto que solo los últimos seis meses de 2019 fueron responsabilidad del equipo de Gobierno actual, pero también que se optó por una línea continuista que hizo que el ejercicio se cerrase con una inversión de 58,77 euros por habitante. 

Esta cifra, sin embargo, cayó de forma preocupante en 2020, hasta los 31,56 euros por palentino. El del año pasado fue el primer presupuesto firmado y ejecutado por el actual equipo de Gobierno y la caída de la inversión al término del ejercicio es del 48,4% si se compara con 2018.

Obviamente, la pandemia del coronavirus ha tenido y que ver, y mucho, es el drástico empeoramiento de este indicador. Conviene recordar que durante el primer estado de alarma, entre los meses de marzo y mayo, se paralizó la licitación de toda obra pública, y, con ello, la inversión por habitante. 

De hecho, esos 31,56 euros gastados por cada uno de los 78.144 vecinos de la capital es la cifra más baja desde 2008, y solo comparable a la de 2016, cuando el Consistorio invirtió apenas 33,57 euros.

Pero aunque la pandemia explique en parte esta situación también hay otros factores a tener en cuenta para explicar ese empeoramiento de la inversión por habitante. El más significativo es la baja ejecución del plan de inversión diseñado por el equipo de Mario Simón.

Solo en 2020, el Partido Popular y Ciudadanos dejaron pendientes de ejecutar proyectos por valor de 5,4 millones de euros de su programa de inversiones. El motivo: la ausencia de ventas de suelo público.

Cuando el equipo de Gobierno diseñó el presupuesto de 2020, confeccionó un plan de inversiones dotado con 10.698.900,23 euros de los que más de la mitad, concretamente 5.436.705,23 euros, dependían de que el Ayuntamiento vendiese su patrimonio. Ventas que no se lograron y que, lógicamente, tiraron abajo la inversión por habitante, una situación que el Consistorio pretende cambiar. 

Para este año, se ha diseñado un plan de inversiones menos ambicioso, de 8.724.259,4 euros, de los que 2.479.015,23 están vinculados a la enajenación de suelo público. El grado de dependencia es menor y, en el peor de los casos, su incumplimiento afectará en menor medida a la inversión por ciudadano.

De hecho, de todo el programa de inversiones para 2021, los proyectos vinculados a la venta de suelo son la reforma del campo de fútbol de Pan y Guindas para convertirlo en un campo de rugby (680.000 euros) y la ampliación del cementerio, un proyecto de 500.000 euros que ya ha recibido el visto bueno para su próxima licitación, como principales. Otros, como los planes de vías y obras y de asfaltado, dotados con 500.0000 euos para este año han dejado de estar condicionados a esta vía de ingresos. 

De momento, según los datos del primer trimestre del año, la inversión por habitantes es de 2,5 euros por vecino. Todavía es pronto para saber en qué nivel estará al finalizar el año, y si se superarán los del año de la pandemia del coronavirus.

gasto de 839,5 euros. La caída en la inversión por habitante no ha ido paralela a la del gasto por habitante, es decir, a aquel que tiene en cuenta todos los gastos efectuados a lo largo del año. Este indicador se encontraba al término de 2020 en los 839,5 euros por vecino cuando en 2018 era de 812,2 euros.

Es un 3,3% más, lo que significa que mientras la inversión por vecino caía, los gastos corrientes y todo lo que tiene que ver con el mantenimiento de los servicios municipales crecía. Sí se registra un descenso de este indicador respecto al primer año de mandato, ya que el Ayuntamiento cerró 2019 con un gasto por habitante de 901,24 euros, un 6,8% más.

Durante el primer trimestre de este año, este indicador alcanzó los 143,3 euros por vecino de la capital, pero aún es pronto para saber en qué niveles cerrará el equipo de Gobierno de PP y Cs este ejercicio. 

Dos años es el tiempo que Mario Simón y Alfonso Polanco tienen para hacer crecer dos indicadoras que definen muy bien qué cantidad de los recursos que mueve el Ayuntamiento se destinan a mejorar la ciudad más allá, el principal objetivo que toda corporación se marca al inicio del mandato.