La Concejalía de Fiestas hizo coincidir ayer el encendido de la iluminación navideña con la celebración del Showpping Day en respuesta a a la petición del sector comercial, que considera que puede animar las ventas, explicó la edil responsable del área, Laura Lombraña. 

El dispositivo desplegado por toda la ciudad que, «como es tradicional, combina material alquilado y propio», matizó la concejala, cuenta con unos 450 motivos diferentes, entre los que destaca la caja mágica, ubicada en la plaza Mayor. Con unas dimensiones de cinco metros de ancho por otros tantos  de largo y seis y medio de altura,  realiza un espectáculo sincronizado de luz y sonido en bucle que se ha decidido se reproduzca constantemente en vez de a las hora en punto para evitar aglomeraciones. «En total cuenta con 10.000 píxeles RGB programables y 5.000 leds normales», añadió.

La parte alquilada, «con cargo al contrato conjunto para el resto de las fiestas de Navidad y San Antolín hasta el final de mandato», recordó Lombraña, se compone de 110 arcos, 26 de ellos en la calle Mayor; 200 metros de guirnalda, la decoración de la fachada del Ayuntamiento y los 30 balcones dobles de la plaza Mayor,  la caja mágica, un belén de mimbre y LED de 12 metros de altura en la plaza de la Inmaculada, y diferentes decoraciones de árboles y rotondas en las principales avenidas y puntos de acceso a la ciudad.

En lo que respecta a la iluminación propia, desde la Concejalía se ha previsto la instalación de 200 guirnaldas en farolas, 80 arcos distribuidos por los barrios,  así como la decoración de los árboles de varias plazas y otros motivos, «entendiendo que las luces de Navidad generan puestos de trabajo al estimular el consumo y que, por tanto, hay que llegar al máximo de puntos posibles», manifestó la concejal.