Renfe aumentará, desde el próximo 7 de junio, su oferta en trenes Ave y de Larga Distancia con un total de 252 servicios semanales, que se suman a los 1.231 que la compañía tiene programados a día de hoy. De esta manera, la oferta de Renfe aumentará en un 20,5% y se situará en un total de 1.483 trenes semanales. En Castilla y León, las ciudades de Salamanca, León, Palencia, Valladolid y Segovia se beneficiarán del aumento de servicios.
Con la nueva oferta, que podrá aumentar más si la demanda continúa creciendo, Renfe va a poner en circulación, cada semana, casi 520.000 plazas en trenes Ave, Alvia, Euromed e Intercity, cifra que supera en 90.000 las plazas que ofrece en este momento.
En Castilla y León, León, Palencia, Valladolid y Segovia, se beneficiarán de la puesta en servicio del Alvia con salida de Madrid Chamartín a las 18,35 horas con destino a Gijón. Este tren circulará los lunes, miércoles y viernes. En sentido contrario, también volverán a circular los trenes Alvia con salida de Gijón a las 7,00 horas (martes y jueves) y el que sale a las 14,12 horas (domingos).
Salamanca será la otra ciudad castellana que se verán favorecidas por el aumento de frecuencias. El Alvia con salida de Madrid a las 8:50 horas, que hasta ahora solo circulaba los sábados y domingos, comenzará a circular todos los días de la semana. Lo mismo ocurrirá con el Alvia que sale de Salamanca a las 18:20 horas con destino a Madrid. A partir del 7 de junio, este tren circulará a diario y no solo los sábados y domingos.
El incremento de oferta desde el 7 de junio se producirá en todos los corredores ferroviarios. De hecho, afectarán a las relaciones que unen la capital con todo el norte peninsular. La línea Madrid-Santander aumentará su oferta con un tren más los viernes y los domingos. La oferta completa de este corredor norte pasa de 240 a 282 servicios semanales (42 más, lo que supone un incremento de un 17,5%).
Todos estos servicios Ave, Alvia, Euromed e Intercity disfrutan de la certificación Aenor de protocolos anti-Covid y del sello SGS Disinfection Monitored, que certifica niveles óptimos de desinfección en todas las superficies del tren frente a un amplio espectro de bacterias y virus, entre los que se encuentra la Covid-19.
Además, Renfe aplica estrictos controles de limpieza y desinfección durante las labores de mantenimiento de los trenes, en talleres y antes del inicio de cada una de las circulaciones.