El miércoles comenzaron las obras de reparación del puente de Rojadilllo, una actuación que será financiada con 12.000 euros por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León y cuyo objetivo será recomponer la unidad formal y estructural de la fábrica de piedra de la aleta del puente que se derrumbó hace unos meses, así como garantizar la estabilidad de la infraestructura.

La noticia ha sido muy bien recibida por el alcalde de Brañosera, Jesús Mediavilla, que ha agradecido al organismo regional «su disposición para hacerse cargo de una intervención que difícilmente podría haber sido sufragada por la Junta Vecinal de Salcedillo», propietaria de los terrenos en los que se ubica Rojadillo.

«Acciones como esta demuestran que la coordinación entre instituciones tiene efectos positivos para el ciudadano», indica el regidor norteño, que también recuerda que la restauración del puente supondrá la recuperación de un espacio muy querido por los vecinos de la zona y de enorme atractivo para los visitantes.

La intervención se plantea respetando la concepción y las técnicas constructivas originales, así como el valor histórico de la estructura, siguiendo los criterios establecidos en la arqueología de la arquitectura. Para ello, se procederá a la recogida de los sillares que han caído al lecho del río y a su identificación, utilizando fotografías antiguas, para facilitar más adelante su recolocación en la posición en la que se situaban antes del derrumbe. Se contempla además la corta y desvitalización del arbolado y la vegetación que invade el puente, una de las causas de los derrumbes.

PASO DE VEHÍCULOS. Asimismo, desde el Consistorio de Brañosera apostarán porque la prohibición de permitir el tráfico rodado se mantenga una vez concluyan las obras. «La circulación de vehículos por encima del puente no aporta ningún servicio a los habitantes de la zona. Por eso creemos que quien quiera disfrutar del territorio debe hacerlo aproximándose hasta el puente a pie, en bicicleta o de otras formas que no impliquen el uso de vehículos a motor», indica finalmente Mediavilla, que también asegura que las obras van a buen ritmo.

FOTOGRAFÍA: ANDRÉS DIEZ