Tecsa inicia la reparación de la pasarela de los Tres Pasos

Carlos H. Sanz
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La actuación obligará a cortar la comunicación entre San Antonio y el Ave María durante diez días, hasta el 25

Tecsa inicia la reparación de la pasarela de los Tres Pasos - Foto: Sara Muniosguren

Operarios de la empresa Tecsa comenzaron ayer los trabajos de reparación y mejora de la pasarela de Los Tres Pasos, que comunica el barrio de San Antonio con los del Ave María y El Cristo sobre las vías del tren. Unas obras que exigirán que el paso esté cerrado durante al menos diez días, hasta el 25 de noviembre.

El objetivo de los trabajos es eliminar el bache existente en la rampa de acceso desde la vertiente del Ave María, un defecto que lleva meses ocasionando molestias a los conductores y que parece que está ligado al asentamiento de tierras. 

De hecho, Adif ha controlado, a través de la instalación de testigos, si se está produciendo un desplazamiento de las tierras, lo que supondría un grave problema estructural. El resultado de este análisis, a falta de comunicación por parte del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, parece ser negativo, por lo que se ha procedido a reparar el problema de la calzada.

De momento, ayer solo fue necesario cortar al tráfico el vial que conecta la glorieta a los pies de la estructura con la calle La Pernía y el paseo de Victorio Macho. Varios operarios de Tecsa centraron las primeras horas de trabajo en el  pulido a conciencia de las costuras y rellenos que se aplicaron durante las semanas pasadas para mantener sujetas las grandes losetas de hormigón que recubren la rampa.

Esta actuación se suma al cúmulo de deficiencias que viene arrastrando la pasarela desde su apertura el 7 de marzo de 2017, cuyas obras fueron adjudicadas a Tecsa por 1,6 millones de euros (más IVA). Uno de los primeros problemas que se detectó fue que las barreras de protección no cumplían con las condiciones de seguridad de utilización y accesibilidad que establece el Código Técnico de la Edificación porque sus aberturas de más de 15 centímetros suponían un peligro, sobre todo, para los niños. Este problema se tardó casi tres años en solucionar con una inversión de 68.823 euros.

Además, la adecuación urbana del entorno exigió una inversión adicional de 500.000 euros, garantizando así su urbanización y ornato. El hundimiento del firme y la rotura de las placas de hormigón que recubren las rampas es el nuevo problema al que se enfrenta Adif, aunque se desconoce si será el último.