Al gremio de transportistas de Palencia su trabajo se le hace más cuesta arriba, y no precisamente por circular por una carretera de alta montaña, sino por todos los pagos a los que tienen que hacer frente nada más montarse en la cabina de sus camiones. Y es que si ya de por sí la situación era bastante complicada para los profesionales por el alto precio del combustible, el nuevo peaje en las autovías del Estado supondrá la puntilla para un sector ya de por sí tocado.

«Falta de sensibilidad» o «desconocimiento absoluto de la realidad» son algunas de las expresiones empleadas por el sector para definir esta, a su juicio «injusta», propuesta gubernamental. «Si siguen así van a conseguir que los pocos que quedamos dejemos aparcado el camión», afirma el guardense Óscar Baños, presidente de la Asociación de Empresarial Palentina de Transportes (Aempatra), quien asegura que, ni de lejos, es el «momento adecuado» para este anuncio. Y es que, según manifiesta Baños, a los transportistas les ahoga el «elevado» precio del combustible, que ronda los 1,43 euros el litro, con unas subidas en las últimas semanas «de dos, tres, cuatro y hasta cinco céntimos» cada siete días.

Baños rechaza rotundamente que el sector utilice las carreteras sin pagarlas, cuestión en la que se han excusado muchos para defender este nuevo sistema de tarificación por uso. Al respecto afirma que «más de la mitad» de los 5.000 litros mensuales que consumen de combustible va a parar al Estado en forma de impuestos.

«Los transportistas hacemos una gran contribución con nuestros impuestos, unos once mil millones el pasado año, que no fue especialmente bueno por la pandemia», subraya el presidente de Aempatra. En este punto, recuerda la situación que atraviesa el Reino Unido, donde la escasez de profesionales está dejando el país británico desabastecido. «Nos veremos como ellos y después se llevarán las manos a la cabeza. Dicen que no hay conductores, pero a los pocos que hay se les maltrata», concluye.

Crítica a la que se suma CEOE Empresas de Paelncia, quien cifra en 30.000 millones la aportación a las arcas del estado de los conductores a través de otros impuestos directos, indirectos y tasas. «El pago por uso de las autovías podría generar que muchos opten por carreteras secundarias, donde se produce un 78 por ciento de los accidentes», apuntó el colectivo.

AUTOBUSES

«No podemos más. Es otro palo en la rueda». Quien habla es Luis Vallejo, presidente de la Unión Palentina de Empresarios de Transporte de Viajeros (Upevi), grandes damnificados también del futuro peaje.

«El precio del combustible y el pago por el uso de autovías repercutirá en los viajeros y en la economía de muchas empresas, que en algunos casos no podrán hacer frente», lamentó Vallejo.