Los partidos de pretemporada hay que tomarlos como tal. Sirven para coger fondo y forma, para asimilar los conceptos, especialmente en los equipos totalmente remodelados, como es el caso del Zunder Palencia. A nivel interno, valen para coger sensaciones y en el ámbito externo, para animar la campaña de abonados.
Cierto es que pone, y mucho, ganar al Valladolid en el polideportivo Pisuerga (que lo hizo) y haberlo hecho ante el todopoderoso SanPabloBurgos, recién aterrizado de forma forzosa de ACB y con un poderío económico, deportivo y social impropio de la categoría. Los fríos números muchas veces ponen blanco sobre negro lo que ha acontecido en un partido. Y fue el caso. El Zunder Palencia fue de más a menos, de ganar el primer cuarto por once puntos, igualar el segundo, y acabar cediendo en la segunda parte por 16 puntos. Lectura: el cuadro de Pedro Rivero acusó el enorme desgaste físico del partido del día anterior y los burgaleses sacaron a relucir su potencial.
Con menos de 24 horas de margen sobre el intenso y exigente partido del día anterior ante el Valladolid, afrontaba el Zunder el segundo partido del triangular de la Copa de Castilla yLeón ante el Burgos, que llegaba descansado y con ganas de darle la vuelta a una pretemporada un tanto decepcionante. Fue en los primeros diez minutos donde el equipo morado, ayer de blanco, ofreció su mejor versión, la que puede mostrar en la inminente Leb Oro. Wintering dirigía con velocidad y un ritmo frenético al equipo, Schmidt seguía teniendo la muñeca caliente, especialmente desde la línea de 6,75 metros, Chumi Ortega era eso, el marine, un incordio en defensa.
Los burgaleses no daban crédito al festival morado y no encontraban manera de frenar a los palentinos. Pero las fuerzas tienen un límite y más a estar alturas, con el depósito todavía sin llenar. Zunder Palencia no solo acusó el esfuerzo de un día antes, sino una pretemporada extraña, al incorporarse tarde y de forma escalonada algunos jugadores llamados a ser determinantes, con su consiguiente bajo nivel de juego y forma física.
Burgos apaciguó primero el juego morado y luego sacó el rodillo. Y lo hizo con un excolegial como protagonista de la remontada, Calvin Hermanson. Y en la pintura, con el esloveno e internacional austriaco Mahalbasic.
Pese a todo, Zunder Palencia tuvo el triunfo en sus manos. A falta de 42'' ganaba por dos puntos, pero dos triples consecutivos del canario Álex López determinaron la suerte del partido. Zunder no volvió a anotar. El lanzamiento de Wintering se salió del aro y el de Schmidt fue ya a la desesperada. La derrota final por cinco puntos incluso le deja sin opciones al título regional en el caso de producirse un triple empate a puntos.
próximo partido. Tras esta derrota ante el Burgos en la Copa CyL, pero con muy buenas sensaciones, Zunder Palencia cerrará la pretemporada este próximo viernes, a las 20,30 horas, en el pabellón, midiéndose al Gipuzcoa.