Luis Miguel de Dios

TRIGO LIMPIO

Luis Miguel de Dios

Escritor y periodista


Democracia

29/11/2022

Defendamos la democracia. Jamás pensé que volvería a ver este eslogan al frente de una manifestación aquí. La vez anterior, aunque con otras palabras pero el mismo objetivo, data del ya lejanísimo febrero de 1981, días después del intento de golpe de estado de Tejero. Hubo multitudinarias marchas en toda España precisamente en defensa de eso, de la democracia, amenazada entonces por los intentos de algunos (y no solo militares) de volver a la dictadura. A estas alturas, parecen, sobre todo para los más jóvenes, recuerdos y batallitas del abuelo Cebolleta, pero, ¡ay!, ahí están las movilizaciones del pasado domingo en varias ciudades de Castilla y León. Convocadas por UGT y CCOO y respaldadas por numerosas organizaciones, congregaron a gentes que ven peligrar en esta tierra la convivencia cívica, el respeto al diferente, el diálogo social, en definitiva, la democracia tal y como la entiende cualquier demócrata. ¿Qué ha ocurrido?, ¿qué nos ha ocurrido para llegar a tal extremo, para que muchos ciudadanos salgan a la calle bajo el lema 'Defendamos la democracia'?, ¿por qué y de quién hay que defenderla? Lo terrible es que los que se manifestaron el domingo en las capitales de Castilla y León y en Ponferrada están convencidos de que es necesario defender la democracia de los ataques y resoluciones de nuestras propias autoridades, algo que parece un sinsentido, pero que, visto lo visto, comienza a calar hondo. Y todo ello en poco más de medio año de gobierno de coalición entre PP y Vox. Sí, ya sé que no son iguales, que es muy distinto lo que hace y dice el cazador de virus comunistas Mariano Veganzones, consejero, entre otras funciones, de Empleo, de las palabras y actuaciones de Isabel Blanco (PP) , titular de Familia, pero… Y este «pero» tiene un claro destinatario, que no es otro que el presidente de la Junta, cuya pasividad ante las posturas y los exabruptos de Vox, lanzados incluso en las Cortes, comienza a ser alarmante. Solo siete meses y ya hay mucha gente que siente la necesidad de defender la democracia. Mañueco debería escuchar y actuar antes de que Gallardo también se lo meriende a él.