La pandemia por el ´coronavirus provocó la suspensión de la liga en el Grupo VIII de la Tercera División cuando restaba todo un mundo por delante, doce jornadas, 36 puntos.

El Palencia Cristo Atlético, en el momento de la suspensión, venía de derrotar al Burgos Promesas 2000 en Castañares, sacándolo de los puestos de play-off por primera vez en la temporada. Los morados se encontraban en la sexta plaza, a seis puntos el play-off y con las ilusiones renovadas de poder completar la remontada.

Semanas más tarde, pese al inicial anuncio del presidente de la RFEF, Luis Rubiales, de que las competiciones se iban a acabar de una u otra manera, se anunció la suspensión definitiva de la liga regular, clasificándose para el play-off los cuatro primeros clasificados en el momento del parón. Decisión que ha provocado en otras Comunidades denuncias.

No fue el caso en el Grupo VIII, pese al malestar de algunos equipos, entre ellos el morado, que se veía sin opción de luchar por el ascenso a Segunda División B. La RFEF varió el sistema de competición del play-off. En vez de una eliminatoria entre los campeones de cada grupo, por un lado, y el resto de clasificados por otro, y posteriormente otras dos rondas (todo ello por sorteo y sin proximidad geográfica) se optó porque cada Territorial la organizase con sus cuatro clasificados en un escenario neutral.  

Se disputarán en todas las sedes tres partidos. Dos de semifinal entre el primer y cuarto clasificado, por un lado, y segundo y tercero, por el otro. Los ganadores de ambos encuentros se jugarán el ascenso a Segunda B.

Como ya adelantamos en su momento en este periódico, en el caso del Grupo VIII de la Tercera División, la Territorial de Castilla y León eligió La Balastera como escenario de estos partidos. Se considera el lugar idóneo por diversos motivos. Primero, por las excelencias del estadio y su aforo de 8.000 espectadores. Aunque, en principio, los encuentros tienen que disputarse a puerta cerrada, no se descarta que se pueda hacer con público con un aforo limitado. La Junta, en teoría, permite espectáculos al aire libre en recintos que puedan facilitar la distancia social y con un máximo de 1.500 espectadores. No habría problema alguno en el estadio palentino.

Por otro lado, Palencia está a una distancia relativamente pareja a las localidades que representan a los cuatro clubes participantes y con buena comunicación por carretera: Zamora (146 kilómetros), Segovia (161), Aranda de Duero  (90 kilómetros), Soria (226 kilómetros).

El Ayuntamiento de Palencia accedió de inmediato a la solicitud de la Territorial. Durante todo este periodo de tiempo de inactividad, el césped ha seguido siendo cuidado con mimo por Jardinerías Castilla. Al no haber actividad de partidos y entrenamientos del Palencia Cristo Atlético y encuentros del Palencia Rugby Club, el césped se encuentra en un estado que desde hace años no se había alcanzado. Es una alfombra.

normas. La Territorial ya ha dado a conocer fechas y horarios de los partidos. El sábado, 18 de julio, se medirán a las 20 horas, el primer y cuarto clasificado en el momento de la suspensión de la liga, el Zamora y Numancia B, respectivamente. 

Un día más tarde, en el mismo escenario y a la misma hora, se enfrentarán el segundo y tercero, Gimnástica Segoviana y Arandina.

El 25 de julio, también a las 20 horas, se jugará el partido decisivo para el ascenso a Segunda B entre los dos equipos ganadores de semifinales. El ganador logrará la Segunda División B. Si este no fuese el campeón de grupo, tendría una segunda opción.  En ese caso, de no ganar el Zamora, los rojiblancos tendrían la posibilidad de luchar por otras dos plazas en juego entre los campeones de otros grupos que no lograsen el ascenso en estos play-offs territoriales.

Otra de las particularidades de esta singular fase de ascenso es que los partidos durarán sí o sí 90 minutos, ni prórrogas, ni penaltis en caso de empate. De darse ese supuesto, pasaría la eliminatoria aquel equipo que hubiese acabado por delante de su rival en la liga regular.

En cuanto a la preparación, ha sido una situación complicada para los cuatro participantes. Al largo parón impuesto por la cuarentena, hay que sumar que hasta la fase II no se permitía empezar a entrenar y además en grupos reducidos de jugadores. Una vez finalizado el estado de alarma, ya lo pudo hacer todo el grupo. Será una pretemporada en plena temporada para jugar uno o dos partidos. Y tras la disputa de estos encuentros, de nuevo a parar para iniciar la próxima campaña, que no tiene todavía fechas, aunque se presume y ya se está haciendo cada vez más extensiva la posibilidad que no comience la Tercera División hasta el mes de octubre.

palentinos. El hecho de no jugar el play-off el Palencia Cristo Atlético no significa que no haya presenciar palentina en este play-off y no sólo por el escenario.

En dos de los cuatro clubes hay jugadores palentinos, Adrián Herrera y Juan Ignacio Pajín Silva, en el Numancia B y Alejandro Conde, en la Segoviana. Hay además viejos conocidos de la afición palentina al haber jugado en diversos clubes de nuestra provincia, como Adrián Pérez, Rui, Arranz (Segoviana).

Adrián Herrera (3 de enero de 1999, Coria) se formó en el Villamuriel, donde reside su familia y lo ha hecho él hasta trasladarse a Soria,  para pasar al ClubInternacional de la Amistad, antes de incorporarse a las categorías inferiores del Valladolid, donde destacó en su faceta goleadora, llegando a formar parte de la plantilla de la Segunda B. La pasada temporada fue cedido al Palencia Cristo Atlético, donde hizo muy buenos números.

Tras su etapa de cesión, decidió rescindir con el club pucelano, para fichar por el Numancia, donde juega con su filial, aunque ya haya disputado varios partidos con el primer equipo de Segunda División A.

Juan Ignacio Pajín Silva (2 de agosto de 1998, Villamuriel) se formó en el ClubInternacional, tras su paso en juveniles por Valladolid, fichó por los sorianos, siendo el capitán del filial numantino. Actúa en la posición de lateral derecho.

El club soriano tiene la ventaja sobre el resto de rivales, de haber podido entrenar con menos restricciones que sus rivales, por aquello de ser filial de un club profesional.

Alejandro Conde (Talavera de la Reina, 4 de septiembre de 1992) juega su segunda temporada en la Segoviana. El ventabañense, hijo del exfutbolista del Palencia CF y Real Valladolid, Conde, viene de superar una lesión de menisco que precisamente se produjo en el partido que su equipo jugó en La Balastera el 1 de marzo pasado.

En Tercera División ha jugado en el CD Aguilar a las órdenes de Luis Sierra, en el  Palencia Cristo Atlético en dos campaña, en el CDPalencia en la temporada 2014-15, en el Villaralbo zamorano, en el Astorga, en el Haro y en estas dos últimas campañas en el cuadro azulgrana. Conde actúa en la posición de media punta.