El concurso de la Olla Ferroviaria llenó de olor y sabor la calle Mayor de la capital durante la mañana de ayer gracias a la participación de ocho grupos de cocineros que, en total, elaboraron 16 versiones distintas de un plato sencillo pero suculento: patatas con carne. Eso sí, con Alimentos de Palencia.
Dieciséis propuestas culinarias distintas de entre las que destacó una, la elaborada por el palentino José Carlos Hidalgo, quien se alzó con el primer premio después de que el jurado considerase que las por él cocinadas eran las mejores en presencia y sabor.
El premio, por lo tanto, se quedó este año en la capital para alegría, sobre todo, de la Asociación Española Contra el Cáncer de Palencia, ya que en un bonito gesto, Hidalgo donó los 250 euros del premio al colectivo para apoyar su labor.
El primer premio del concurso de ollas se queda en la capital - Foto: Sara MuniosgurenEl pódium lo completó una alianza entre un paredeño y una ucraniana, Clemente y Tatiana, que cocinaron el segundo mejor guiso de patatas con carne y, por lo tanto, recibieron un premio de 200 euros; mientras que el tercer galardón correspondió a los cántabros de la peña Las Cachavas.
Una difícil elección para el jurado porque los 16 platos presentados a concurso estaban realmente sabrosos, con el toque que una olla ferroviaria calentada con el fuego del carbón da a los guisos. Entre los participantes, muchos llegados de Cantabria pero también de Madrid, además de destacar la presencia palentina, con cocineros de Paredes, Villamuriel y San Cebrián de Campos.
María José López, gerente de Palencia Abierta, expresaba su satisfacción por el éxito de la iniciativa. «Los objetivos principales eran el de dar vidilla y alegría a la ciudad y hablar de Alimentos de Palencia y del consumo local, y lo hemos logrado», aseveraba.
El primer premio del concurso de ollas se queda en la capital - Foto: Sara MuniosgurenLópez recalcó que «lo importante que es apoyar a los productores locales» en un momento de incertidumbre como el actual. «Es el momento de ser muy responsables con lo que consumimos, y si ayudamos a los nuestros nos estamos ayudando a nosotros mismos», sentenció.
La iniciativa, además de promocionar el producto local, tuvo también un carácter solidario, ya que se repartieron cerca de 500 raciones de degustación al premio de 1 euro entre los asistentes. No quedó una sola y eso que en su cocinado se emplearon más de 150 kilos de patata.
«Esta es una manera de vender nuestra ciudad y, además, con un fin solidario como es la lucha contra el cáncer. Es un motivo de alegría que todo haya salido bien», finalizó María José López.