Rafael Marcos continuará 2 años más al frente de San Juanillo

Carlos H. Sanz
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Este jubilado y sindicalista, de 70 años, intentará que «la asociación siga creciendo y funcionando»

Rafael Marcos continuará 2 años más al frente de San Juanillo - Foto: Eva Garrido

La Asociación de Vecinos del barrio de San Juanillo culminó el pasado viernes las elecciones para la renovación de cargos de su junta directiva, al frente de la que continuará Rafael Marcos. Este jubilado, de 70 años y sindicalista, se puso al frente de este colectivo vecinal hace cuatro años y bajo su presidencia ha logrado que tras el parón por la pandemia de covid regresen las actividades al centro social de Jesús Paredes.

«Mi objetivo para los próximos dos años es que la asociación de vecinos siga creciendo y funcionando, que tenga una estabilidad cada vez mayor gracias a que se incremente el número de asociados, que en la actualidad ronda los 900», asevera.

Rafael Marcos se marca como meta, además, mantener el pulso de la asociación. «Seguir organizando cursos, las fiestas y diversas actividades que den vida al centro social, un reto en el que no hemos parado nunca», añade.

Para alcanzar estos objetivos, el presidente del barrio de San Juanillo se ha rodeado de una junta directiva con dos caras nuevas y en la que Belén Carrión figura como vicepresidenta, Eduardo Santiago como tesorero y José Manuel Ruiz como secretario. Esta se completa con nueve vocales: Carmen Gutiérrez, Lucía Pérez, Ángela Blasco, José Ignacio Caballero, Isabel Pérez, Brezo Sánchez, Angelines González, María del Rosario Zan y Ana Isabel Gómez.

En cuanto a la situación del barrio y qué puede hacer el Ayuntamiento por mejorar San Juanillo, Marcos insiste en que «todavía hay problemas de asfaltado en varias calles». «Además, se debe poner más cuidado en el mantenimiento de parques y zonas verdes, así como de espacio públicos como la plaza de san Juanillo, cuya conservación no es la adecuada», añade.

Por último, el responsable vecinal traslada las quejas de los ciudadanos por cómo la modificación de la Línea 2 del autobús urbano ha afectado al barrio. «Han quitado una parada y la gente se está quejando», señala.