El final del verano y el comienzo del nuevo curso escolar, que incrementa muchos gastos después de los dispendios veraniegos, supone una de las épocas más difíciles para los hogares, cuyos bolsillos merman considerablemente y se quedan cortos para superar una cuesta que se presenta muy empinada.
La subida de los precios en la suma de los últimos 12 meses fue de un 3,5%, mientras que los convenios colectivos de empresas y los de ámbito superior a la empresa negociados este año hasta agosto suponen una subida media de lo salarios de un 1,17%. Esto pone de manifiesto que el incremento del Índice de Precios al Consumo (IPC) haya sido el triple de lo que han subido los sueldos, con el consiguiente lastre para ya las de por sí sufridas economías domésticas por los efectos de la pandemia. Luz, transporte, alquiler y compra de vivienda, combustibles, alimentos y el retorno a los colegios hacen el resto y el cóctel de gastos de todo tipo no deja de crecer.
Si en agosto en Palencia los precios se dispararon en un 3,5% respecto al mismo mes de 2020, en Castilla y León lo hicieron un 3,8%, cinco décimas más que la media nacional, la subida representó un 3,3 por ciento. Este comportamiento se produce por un nuevo aumento de los costes de la vivienda (13,5% más) tras la subida media del precio de la luz y del transporte en un 9,5%, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Además, en relación a 2020 los precios se elevaron en la Comunidad un 2% de media en alimentos y bebidas no alcohólicas -que incluyen refresco y zumos (7,4%)? y la fruta (4,6%)-; el vestido y calzado (1%); menaje de hogar (1%); medicina (0,8%); enseñanza (0,9%) y hoteles, cafés y restaurantes (1,5%). Por el contrario, se redujeron un 3,1% los precios de comunicaciones, un 1% el ocio y cultura y un 0,3% bebidas alcohólicas y tabaco.
Al respecto, el abogado y presidente de la Unión de Consumidores (UCE) de Palencia, Alberto Arzúa, señaló que una economía familiar mediana, sin salarios acordes a las subidas de precios de productos y servicios básicos, «sufre un quebranto enorme acrecentado si en el hogar hay hijos en edad escolar, con el gasto añadió de ropa libros, material y actividades extraescolares y se les hace muy cuesta arriba la cuesta de septiembre, incluso más que la de enero».
En esta línea lamentó que los consumidores «estén manos» de las eléctricas y las decisiones del Gobierno, lo que se puede comparar, salvando las distancias, «con un proceso de separación cuando los padres no se llevan bien y utilizan a los niños como moneda de cambio». A ello, añadió que se «está jugando con el sufrido usuario que no sabe a qué hora poner los electrodomésticos de mayor consumo y las operadoras se aprovechan ofreciendo contratos que ahora pueden ser beneficios pero a la larga resultar muy perjudiciales, con lo cual hay que lo que está firmando y aceptando».
Por su parte, César de los Bueis, abogado y secretario de la Union Cívica de Consumidores (UNAE) concretó que han aumentado desde el inicio del verano a esta fecha las consultas y reclamaciones sobre la subida de la vivienda de primera y segunda mano ya que, tras un abaratamiento post primeras olas de la pandemia, vuelve a la tendencia inflacionista en la capital y provincia; preguntas sobre compraventa de vehículos de ocasión y segunda mano así como reparaciones de los mismos tras el parón del confinamiento; herencias donaciones y fiscalidad; e hipotecas y clausulas abusivas de gastos de contratos de mas de 15 años, dado que el Tribunal de Justicia de la UE debate su legalidad.
Consejos para abaratar la factura de la luz
Según Cesar de los Bueis, abogado y secretario de la Union Civica de Consumidores (UNAE) de Palencia, para abaratar la factura energética alude a la recomendación de utilizar la electricidad y gas lo mínimo necesario; adaptar los electrodomésticos a niveles A de bajo consumo; invertir en aislamiento térmico; ir pensando en montar sistemas alternativos renovables en edificios y casas particulares (al bajar mucho en su precio en estos momentos) y también usar, en la medida de lo posible, los tramos horarios que sean más económicos. El experto en consumo añadió que, dado que no se puede prever cuánto va a durar esta subida diaria del precio kw hora del mercado regulado, «hay que leer muy bien la letra pequeña de la tarifa libre, exigiendo una copia del contrato antes de firmarlo; optar por períodos de contrato cortos (un año); y si el mercado supervisado vuelve a ser mas económico, sin problema, solicite a la compañía volver al punto de partida. No obstante, es necesaria que se afronte una política energética de largo plazo, no cambiante según el gobierno de turno, y acompasada con Europa, y plantearse un verdadero impulso exponencial a las renovables».