CGT de Administraciones y Servicios Públicos de Palencia ha conseguido que el acoso laboral sea reconocido en los juzgados como accidente laboral.  

Se trata, según expone el sindicato, de los casos de dos técnicos de cuidados auxiliares de Enfermería del Sacyl que lograron en los tribunales de Justicia que el acoso en el trabajo sea  reconocido como accidente laboral, «después de muchas reclamaciones no atendidas por el Sacyl por parte de las afectadas», según indica el sindicato.  

«Antes de que nos viéramos viviendo en el caos de la pandemia, CGT tuvo conocimiento de los casos de dos trabajadoras que sufrieron acoso por sus superiores en el hospital San Telmo, compañeras enfermeras, llevando a una situación insostenible, de malestar físico y, sobre todo, psicológico que tuvo como consecuencia la baja laboral de ambas», expone CGT de Administraciones y Servicios Públicos. 

En una sentencia a la que tuvo acceso este periódico,  recoge que el 10 de julio de 2019  una de las auxiliares, que finalmente demandó a la Seguridad Social, acudió a su puesto de trabajo y mientras estaba preparando historias clínicas, tuvo un incidente con otras compañeras. A partir de aquí acudió al Servicio de Prevención de Riesgos Laborales donde el facultativo la remitió al servicio de Urgencias para que se le realizara una valoración. De hecho, se le diagnosticó «crisis de ansiedad reactiva...con temblores y llanto continuo».

Según se expone en la sentencia, el médico del trabajo remitió un escrito a la dirección del Caupa (división de la Dirección de Enfermería) recomendando que se llevara a cabo una investigación para detectar las causas de estos hechos descritos, tanto por la demandante como su compañera. Asimismo,  la actora mandó otros escritos tanto a la Gerencia como a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.

COMUNICACIÓN. El día 31 de julio de 2020 la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Palencia comunicó a la profesional demandante las medidas correctoras propuestas por la Comisión de Estudio y Análisis de las situaciones de violencia interna. Con todo, la sentencia dictada por el juzgado de lo social número 2 argumenta que los documentos e informes obrantes y  las testificales constituyen los elementos probatorios que sustentan el relato de los hechos. Así las cosas, el fallo declara que la baja médica de la trabajadora emitida por el Sacyl es derivada de accidente de trabajo. 

«CGT se solidariza con las trabajadoras y no va a consentir que esto siga ocurriendo, teniendo en cuenta la dejadez de Sacyl en estos momentos de pandemia ante la negación de permisos y licencias que impiden los descansos de las compañeras. Esta situación está agravando aún más el estrés laboral, que perjudica además a toda la sociedad en el uso de todas sus asistencias sanitarias», según expone Mª del Carmen Calderón Gómez, coordinadora en Sacyl por el  Sindicato de Administraciones y Servicios Públicos de la Confederación General de Trabajadores CGT de Palencia.