Los mejores magos del mundo se volvieron a a dar cita un año más el Día de Reyes en La gala de la Magia que se celebró ayer con un público fiel y entregado que llenó el Teatro Ortega de la capital en su octava edición, bajo la organización de la Diputación.
Con mucho mimo y acierto, los directores artísticos, Juan Mayoral y Huang Zheng, hicieron una cuidada selección de los mejores artistas conformando un show especial y auténtico, que no defraudó a nadie y que combinó la música, el humor y la iluminación dentro de un verdadero espectáculo mágico pleno de números de un ilusionismo muy novedosos durante aproximadamente dos horas.
El programa de esta edición contó como maestro de ceremonias con el argentino Maximiliano Stia, un avezado profesional con más de 30 años de experiencia tanto como mago como showman y presentador de galas.
Los mejores magos del mundo con un público entregado - Foto: Óscar NavarroAsimismo, los palentinos pudieron deleitarse con Bonjin Koo (Corea), que por primera vez llegó al festival con uno de los números de magia clásica oriental más antiguos y tradicionales.
Por otra parte, Gerald Leguilloux (Francia) presentó un número clásico de manipulación y producción de palomas, con un final inesperado y espectacular y con un trato de respeto y delicadeza sorprendente hacia sus animales, protagonistas indiscutibles de esta actuación.
producto nacional. En el lado de los ilusionistas de procedencia nacional, fueron Diego y Elena los que presentaron sobre el escenario del Teatro Ortega en la gala una apuesta única, que se plasmó y caló en el espectador mediante una atractiva fusión surgida de la belleza de un número de acrobacia aérea mezclado con la magia.
Especializado en magia cómica y humor visual, llegó el turno de Hugues Protat, venido de Francia. Se trata de un mago creador de todos sus efectos mágicos y complementados con una formación actoral en la escuela de arte internacional Marcel Marceau. Además, el español Polo presentó su espectáculo de gran formato descrito como «ilusiones novedosas y sorprendentes» con «un estilo juvenil, fresco y desenfadado». Por último, Katrin Weissensee (Alemania), fue la sorpresa de esta gala palentina con un número calificado de «mágico», pero al que no se considera magia propiamente dicha.