El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, reivindicó ayer que «el campo en España requiere del apoyo de todos», en especial del Gobierno de la nación y de su presidente, Pedro Sánchez, que no puede consentir que ni su vicepresidenta, Nadia Calviño, ni su ministro de Consumo, Alberto Garzón, tachen a los agricultores, ganaderos y pescadores de esclavistas y maltratadores. «Seguimos reclamando que Sánchez debería poner orden en su gobierno, si es que manda algo, y cesar a estos ministros que atacan a los agricultores y ganaderos».
Casado, que ayer visitó la empresa Farming Agrícola, en Villamartín de Campos y dedicada a la importación, distribución y comercialización de maquinaria, desde donde clausuró online el XV Congreso Autonómico del PP de Canarias, exigió esta defensa del sector primario en la Política Agraria Común (PAC), donde ve con preocupación la minorización de 5.000 millones de euros en la negociación que ha hecho, «al margen de la negociación de las comunidades autónomas». Además, le advirtió de que la agricultura y la ganadería no se pueden enfrentar con la transición energética. «Tienen que ir de la mano y para la transición hay que recurrir a los fondos europeos, que ahora sólo llegan al 0,75%, y que deberían llegar a lo que supone este sector, el 12% de la riqueza nacional».
Casado, que se refirió a la manifestación en Madrid, insistió en que no dejará de reivindicar el sector primario, de España, de Castilla y León y de Palencia, que «desde hace tantísimos años es una referencia nacional, sobre todo en materia cereal, pero también en cultivos que ha sufrido el azote del Gobierno, como la remolacha», así como en ganadería, con sus quesos, productos derivados del pato o el lechazo con IGP.
En este sentido, apoyó la propuesta del candidato del PP a la reelección de la Presidencia de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que pide un impulso de los regadíos y que se tenga en cuenta que aquellos con mayor productividad, generación de riqueza y empleo son fundamentales en la lucha contra la despoblación. «Apoyamos la iniciativa de Mañueco de una fiscalidad diferenciada para el entorno rural, no solo para emprender, sino también para poder pagar una casa o para pagar un IRPF menor, que además lo apoya Europa en las regiones menos pobladas».
Por otro lado, Casado expresó su apoyo a la industria automovilística. En concreto, citó las plantas de Renault, Nissan e Iveco, para las que reclamó lo mismo que la patronal del sector Anfac y los principales fabricantes, que «se sienten abandonados». «Seguimos viendo con preocupación que, a pesar de que caen las matriculaciones, de que la crisis de los semiconductores impide que se estén entregando los coches en plazo, se quieren subir impuestos. Parece mentira», sentenció.
Casado estuvo acompañado en su visita a Villamartín por la presidenta del PP de Palencia y de la Diputación, Ángeles Armisén, así como por el cabeza de lista del PP por Palencia a las Cortes y consejero de Economía, Carlos Fernández Carriedo, y por la responsable nacional de Agricultura y Ganadería del PP, Milagros Marcos.