«Aspiro a que las políticas de Vox estén en el Bocyl»

R. Briongos
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La vocación política le llegó tras un encuentro con Santiago Abascal, quien no dudó en ficharle para liderar la candidatura a la presidencia de Castilla y León

«Aspiro a que las políticas de Vox estén en el Bocyl» - Foto: Jonathan Tajes

La orientación profesional le vino a Juan Garcia-Gallardo (Burgos, 1992) por vía familiar, no en vano vio desde pequeño el ejemplo de su padre y su abuelo. La vocación política, sin embargo, le llegó tras un encuentro con Santiago Abascal, quien no dudó en ficharle para liderar la candidatura a la presidencia de Castilla y León. En el ecuador de la campaña, afirma notar «una gran sensación de hartazgo» en la población y no se mueve ni un milímetro de los postulados canónicos de Vox. Salvo, quizá, al alabar al exlíder de Izquierda Unida Julio Anguita. «Decía cosas muy sabias», admite.

No se si hago la entrevista al candidato de VOX a la Junta o al futuro consejero de Educación, como dijeron en el debate.

Yo soy el candidato de Vox a la presidencia de Castilla y León. No estoy aquí para postularme como consejero de nadie.

Sí ha avisado de que si Mañueco necesita sus votos para ser presidente exigirán entrar en el Gobierno.

Lo que hemos dicho es que cualquier alianza pasa por que apliquen nuestro programa. Nos presentamos para gobernar, no para ser muleta de nadie, ni para facilitar el Gobierno del PP. ¡Cómo si esta Comunidad perteneciera al PP! Serán los castellanos y leoneses los que digan qué representación otorgan a cada uno.

Y en función de esa representación ¿en qué áreas de Gobierno le gustaría que Vox fuera determinante?

Nosotros tenemos una apuesta decidida por la natalidad. Queremos revertir el invierno demográfico y para ello tenemos un plan muy ambicioso que incluye ayudas directas y también incentivos fiscales. Junto a ello queremos reforzar el sector primario y la industria, que hemos visto cómo se ha ido desmantelando en estos años y tenemos un plan de reducción de impuestos autonómicos, tanto el tramo autonómico del IRPF como el de Patrimonio. 

Si su formación mantiene lo dicho hasta ahora, abogarán además por disminuir el número de Consejerías...

VOX siempre ha tenido claro cuáles son sus prioridades: reducir el gasto político y utilizar esos recursos en los servicios cruciales para los castellanos y leoneses como la Educación o la Sanidad. A lo que no hay derecho es a que haya un Consejo Consultivo de Castilla y León  que cuesta cuatro millones de euros, mientras no hay centros de atención primaria en Ávila o que los sorianos tengan que viajar a Burgos para recibir un tratamiento de radioterapia.

¿Qué le pareció el debate?

Una pena, porque los ciudadanos de Castilla y León no pudieron conocer la verdadera alternativa que es la de VOX. Lo único que vieron fue a los partidos progres que están en la Agenda 2030, practicando un teatrillo y haciendo como que discutían. Fue soporífero.

Entiendo que si son determinantes modificaran la ley electoral para que los próximos debates den cabida a todos los partidos.

La ley plantea un modelo obsoleto. Lo que no tiene sentido es que un partido como VOX, al que hasta las encuestas más pesimistas dan grupo parlamentario, no pueda participar. Con esa Ley, PP, PSOE y Ciudadanos quisieron blindarse contra la aparición de nuevas alternativas.

¿Qué datos ofrecen sus encuestas?

Desconozco si VOX ha encargado encuestas. Lo que sé es que he estado en Soria y en Ávila y llenamos las plazas. Que he estado en Burgos y lo mismo. Que en León y Valladolid no cabía ni un alma.

¿Cuáles son sus expectativas?

Tener la representación suficiente para que las políticas de VOX tengan reflejo en los Boletines Oficiales. Mi prioridad es programa, programa y programa.

Me recuerda usted a Julio Anguita.

Sí, eso lo dijo Julio Anguita, que dijo cosas muy sabias.

Su entrada en política fue sorpresiva…

Sí, incluso para mí. 

¿Qué le decidió a dejar aparcada su profesión de abogado para meterse en este mundo?

Yo veía cómo Castilla y León estaba en decadencia, que se estaba muriendo en brazos de Mañueco y Sánchez, que la estaban condenado a la ruina y al éxodo juvenil. Cuando me ofrecieron la posibilidad de participar sentí el vértigo histórico de poder cambiar las cosas. Decidí hacer el sacrificio de renunciar a mi vida profesional por mi vocación de servicio público.

Antes de la irrupción de VOX ¿qué formación política tenía su apoyo?

Yo he votado a VOX desde su fundación y he revelado que en 2011 otorgué mi confianza a Mariano Rajoy y sin embargo él traicionó sus compromisos electorales. Dijo que iba a bajar los impuestos, pero los subió más de lo que proponía Izquierda Unida. Dijo que iba a hacer una reforma del Poder Judicial y la guardó en un cajón. Dijo que iba a reformar la Ley del Aborto del PSOE y la mantuvo. Y así con multitud de cuestiones. Es como la frase de Nietzsche, no es que me hayas mentido, es que a partir de ahora no puedo volver a confiar en ti.

¿Cuál es el principal problema que a su juicio tiene Castilla y León?

Que como sociedad se está muriendo. Los jóvenes no encuentran aquí ninguna oportunidad y las empresas se van porque no pueden competir con las limítrofes. Castilla y León necesita una nueva alternativa política que dé la esperanza de revertir el rumbo que está tomando.

En general, los partidos coinciden en el diagnóstico pero difieren en las soluciones. ¿Qué propone Vox para acabar con esos problemas?

La diferencia no está en las soluciones. Es que los demás partidos son parte del problema. El PP lleva gobernando Castilla y León desde hace más de 30 años, desde antes de que yo naciera. PP y PSOE son los que han ahogado a Castilla y León privilegiando a otras comunidades en materia de infraestructuras o presupuestaria. Nosotros somos la solución.

Y bajando a lo concreto ¿qué solución proponen para el problema demográfico?

Proponemos un plan ambicioso, como el que se ha demostrado un caso de éxito en otros países. Se trata de apostar de forma decidida por la natalidad, con incentivos fiscales sin letra pequeña, no como los que está ofreciendo Ayuso en la comunidad de Madrid. Una apuesta decidida también por los jóvenes, por que puedan formar una familia.

¿Y por la inmigración? Hasta ahora es lo único que ha dado algún resultado.

Nuestra apuesta principal es la natalidad, y la inmigración de países hermanos como los de la iberosfera o de países europeos puede ser positiva pero siempre ha de ser complementaria. En lo que no creemos es en el modelo de PP y PSOE que hacen una llamada a la inmigración irregular con incentivos y con ventajas para inmigrantes ilegales que en muchas ocasiones vienen de países con capacidad de adaptación limitada, que no respetan nuestra forma de vida, la libertad de las mujeres o los derechos de los homosexuales.

¿Qué limites pondrían entonces a la inmigración?

Hay dos líneas de actuación principales. La primera es defender la frontera. Vemos como en Ceuta y Melilla los guardias civiles están completamente indefensos y que se han llegado a colar miles de inmigrantes en un solo día. Por otra parte hay que detener el efecto llamada. Hay que decirles que si entran de manera irregular no van a recibir las ayudas que les han prometido.

En muchas ocasiones es el propio Gobierno de Marruecos el que modula esa presión de la inmigración.

Marruecos ya viene chantajeando a España y la Unión Europea ha pagado millones de euros a quien nos chantajea, dinero con el cual Marruecos está reforzando su ejército,

Hasta ahora, la aportación de VOX a la política regional no ha sido demasiado brillante…

Usted hágame la pregunta y ya luego emite su particular prejuicio…

Me refería exclusivamente a su repercusión y lo que quería preguntarle es a qué atribuye entonces el ascenso de VOX en Castilla y León.

Hay una cosa clara y es que estamos llenando los actos y todas las encuestas anticipan un gran resultado. Creo que estamos haciendo un buen trabajo en el Parlamento Europeo, en el Congreso de los Diputados y en otras comunidades donde tenemos más representación y los castellanos y leoneses se han ido sumando a esta alternativa patriótica y social que ya ven como la única esperanza de cambio para esta comunidad.

De todas las políticas que la Junta ha puesto en marcha en estos últimos años ¿Cuál es la primera que derogaría?

La primera medida, porque es la que se puede hacer en el minuto 1, es una bajada de los impuestos para detener la sangría de empresas que se están marchando, con la correlativa pérdida de oportunidades laborales para los jóvenes de Castilla y León. Pero de verdad, no como el PP que después de más de 30 años gobernando dice que ahora sí. 

¿Conoce cuántas empresas han tenido que marcharse de Castilla y León?

Esta mañana me han dado el dato. Solo en los seis primeros meses de 2021 se fueron 500 empresas. 

¿Y cómo piensan conseguir que no se sigan marchando empresas?

Tenemos muchas medidas que están en nuestro programa, pero por citarle una, la del tren directo Madrid-Aranda-Burgos. Hay que poner en marcha esa infraestructura que nos vienen demandando los empresarios. Hay que potenciar las infraestructuras y defender el producto local de Castilla y León, tanto el industrial como del sector primario y apoyar a las empresas del turismo de interior. Estuve en Fitur y vi cómo otras comunidades promocionaban de forma decidida su turismo. Me impresionaron los stand de La Rioja o Asturias, pero el de Castilla y León me dio pena.

Ahora que es candidato le ha tocado recorrer la comunidad ¿qué es lo que más le ha llamado la atención?

Yo no sabía que el nivel de hartazgo era tan grande. Eso deja un sabor agrio, que  se vuelve dulce cuando la gente nos dice que confían en VOX para cambiar la situación.

Palpa una gran sensación de hartazgo pero todas las encuestas dicen que el PP vuelve a ganar las elecciones.

Lo reitero, respeto profundamente la soberanía individual de cada votante. Los análisis, mejor a partir del 13 de febrero.

Han querido centrar el tiro en esta campaña en el mundo rural, desde el mensaje de campaña, ese Vox siembra. ¿Por qué?

Siembra es un término evocador. Nosotros no queremos prometer el oro y el moro, como hace el PP. Nosotros venimos a decir que presentamos una alternativa, y que no va a ser fácil, que hay que trabajar para algún día recoger los frutos. Pero efectivamente el mundo rural está muy falto de protección

¿A qué perfil de votante se dirigen?

A toda la población. A nuestros mítines vienen muchos jóvenes, pero también mucha gente mayor. Vienen profesionales liberales, funcionarios, gente del campo. Es algo que tiene desconcertados a los sociólogos que quieren encorsetar a nuestros votantes. Nos va a votar gente de la derecha, pero también de la izquierda.

Su presentación pública como candidato vino precedida de la publicación de unos polémicos tuits. ¿nadie le avisó de la necesidad de borrarlos  para mejorar su imagen?

Yo nunca he vivido de cara a la galería y tenía la conciencia muy tranquila. Siempre he sido muy respetuoso con los demás y si esos tuits uno los coge de forma fragmentada y los saca de contexto recibe unas conclusiones equivocadas. Eran tuits irónicos, de un chaval casi adolescente. 

Leídos en frío asustan un poco.

Yo diría leídos sin una comprensión lectora. Porque cuando uno habla de un jamaicano, por ejemplo, no habla de todos los jamaicanos. Igual que si digo que un burgalés es irrespetuoso, no me estoy refiriendo a todos. Ese es el error que ha cometido la prensa conmigo. Tratar de sacar conclusiones generales de afirmaciones particulares.

También dijo que había que heterosexualizar la selección española.

En esa época yo jugaba al rugby y hacíamos bromas sobre el fútbol. La mejor prueba de que ese tuit no es ofensivo es que he tenido el apoyo de algún jugador y ningún reproche de los integrantes de la selección. Y he recibido apoyos en público, como el de mi amigo Julio Guinea, que dijo que yo siempre, como no puede ser de otra manera, le he tratado tanto a él como su pareja, que son homosexuales, con el máximo cariño y respeto. Esa es la realidad de Juan García Gallardo, una persona respetuosa con la orientación sexual de cada uno, que respeta profundamente a las mujeres, que tengo dos abuelas, tres hermanas, una novia, una madre. Me han intentado caricaturizar pero con poco éxito

Una de sus banderas es la lucha contra lo que denominan feminismo radical. ¿Qué piensan cambiar dentro de las políticas de Igualdad de la Junta?

Vamos a derogar la Ley de Violencia de Género autonómica. Vamos a eliminar esa partida de 137 millones de euros y vamos a destinar ese dinero a los servicios cruciales. Vamos a sacar a los activistas de las aulas para que no haya una industria política diciendo que hay una única forma buena de ser mujer. 

Está muy vivo el debate de las macrogranjas ¿qué límites pondría a este tipo de explotaciones?

Lo que no me han preguntado nunca es sobre una macroganja en particular. Si hay alguna que incumpla la actual Ley medioambiental, hay mecanismos para sancionarla. Lo que no vamos a hacer es castigar a la ganadería intensiva que es la que permite que la gente humilde y trabajadora pueda comer carne y no solo la clase pudiente que parece que es lo quieren los partidos que suscriben la Agenda 2030.

Al margen de las cuestiones medioambientales está también el bienestar animal.

La gente del campo son quienes mejor conocen el medio rural y quienes más empeño ponen en la conservación del Medio Ambiente. Y lo que no vamos a permitir es que unos urbanitas ecologetas vengan a enseñarles como hacerlo. Por poner un ejemplo, ahora hay una normativa europea para que las jaulas para las gallinas sean más grandes. Los ganaderos de ese sector tienen que vender las jaulas viejas y se las compran ganaderos de Marruecos, que en lugar de meter cuatro gallinas meten 10 y cuyos huevos encontramos en los supermercados de España. Nuestros ganaderos se enfrentan a un competencia desleal de productores extracomunitarios que no tienen que cumplir esas exigencias de bienestar animal o de respeto a los derechos laborales.

En la entrevista ha surgido en varias ocasiones el tema de los consultorios rurales. ¿Cuál es su propuesta al respecto?

Hemos dejado claras nuestras prioridades. Cualquier ciudadano de Castilla y León debe tener, en condiciones de igualdad, acceso a una sanidad pública y cercana. Según  la Sociedad Española contra el Cáncer, el 10% de los enfermos de cáncer de Castilla y León tienen que mover su domicilio para poder recibir un tratamiento, y eso es lo que no vamos a permitir. No va a poder haber una escuela y un centro de atención primaria en cada pueblo, pero sí tenemos que acercar la educación y la sanidad a los pueblos. 

Los expertos dicen que no es tanto un problema de fondos, como de falta de profesionales.

Conozco muchos médicos, enfermeras y auxiliares que se van de aquí porque tienen peor retribución. Si se les reconoce su trabajo y su mérito habría muchos médicos llamando a las puertas de Castilla y León.