El hijo pródigo

Alberto Moreno
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Adri Pérez vuelve al Palencia Cristo Atlético, tras haberse desvinculado del Bergantiños. No pudo jugar ante el Zamora al no poder tramitársele la ficha, pero estará este domingo ante el Guijuelo

El hijo prodigo - Foto: Sara Muniosguren

Adri Pérez regresó a su casa, al Palencia Cristo Atlético donde ha desarrollado su mejor fútbol. Lo hace en una tercera etapa, tras sus breves estancia en el Unionistas de Salamanca y la última en el Bergantiños, del que se desvinculase la semana pasada. Esta previsto su redebut este domingo ante el Zamora, pero por un problema burocrático no pudo tramitar su ficha, por lo que tuvo que conformarse con ver a los que son ya sus nuevos compañeros desde la grada.

Adri tenía claro que su destino era volver a Palencia. «No me sentía cómodo, no estaba bien con el cuadro técnico, aunque en el Bergantiños me sentía bien.Había tenido desencuentros con el entrenador y lo mejor era irme de allí. Ahora tampoco sigue él, pero no me arrepiento de haber vuelto a mi casa, al Palencia Cristo Atlético».

Sin desvelar cantidades, ha perdido dinero por jugar en el club morado, con el que firma hasta final de temporada. «No quiero comprometer a nadie, siempre lo he hecho así. Cuando acabe la temporada, ya veremos».

El domingo vio a su equipo desde la grada. «Tenía ganas de jugar, pero no se pudo dar al no poder tramitarse la ficha. Fue un triunfo de mucho mérito ante un gran equipo como es el Zamora. Me alegro que marcase Diego, es un jugador al que necesitamos mucho». Adri no cree que sea bueno «comparar al equipo de esta temporada con el de la anterior. El año pasado éramos un bloque que llevaba tres años juntos, con un ambiente extraordinario en el vestuario.Veníamos con la ilusión de un recién ascendido. Ahora hay una plantilla prácticamente nueva, un nuevo entrenador. El año pasado nos sobraban goles y nos metían muchos y este año no marcamos muchos, pero recibimos pocos. Ni mejor, ni peor, diferente», manifiesta.

A Chuchi le conoce en su faceta de jugador. «Coincidí con él en el Unonistas y en el Palencia Cristo Atlético. Aprendí muchas cosas de él. En julio ya quiso que me quedase, pero me había comprometido con el Bergantiños y mi palabra siempre la respeto. Ahora sí acepté regresar y estoy agradecido por haberme llamado».

Su estreno de morado será ante el Guijuelo. «Es el Palencia Cristo Atlético de la pasada campaña, con mucha ilusión  y no hay nadie que le baje de arriba. Será un rival complicado». La llegada de Adri supone la marcha de Pablo. «Lo siento por él, de verdad, pero yo no tengo la culpa. Espero que tenga suerte allá donde juegue».