Las ventas de roscones de Reyes vuelven a cifras prepandemia

J. Benito Iglesias
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El dulce, ya sea solo o relleno de nata, crema o trufa, motiva al sector pastelero a ofrecer lo mejor, con colas puntuales en las tiendas y varios días de producción para satisfacer la demanda

Las ventas de roscones de Reyes vuelven a cifras prepandemia - Foto: Óscar Navarro

Había ganas y, después de dos años de restricciones -con menos encuentros festivos de familias y amigos por la pandemia-, el Roscón de Reyes ha vuelto a reinar con fuerza en los paladares de los palentinos. Especialmente el 5 de enero como víspera y, también ayer, cuando los Magos de Oriente dejan sus presentes, los obradores calentaron motores y las pastelerías llenaron sus mostradores con el tradicional dulce navideño, formándose colas puntuales de clientes.

«No hemos dejado de repartir roscones con la furgoneta en nuestros cuatro establecimientos para atender encargos. Se nota una mayor demanda y mucha gente comprando, más que el año pasado», apunta a DP José Fernández, repartidor de pastelerías Polo.

Mientras él hace su trabajo, no son pocos los clientes que se acercan al despacho de la avenida Casado del Alisal, donde se puede desayunar cómodamente roscón con un buen café y celebrar los muchos regalos que han dejado en casa Sus Majestades los Reyes Magos.

Las ventas de roscones de Reyes vuelven a cifras prepandemiaLas ventas de roscones de Reyes vuelven a cifras prepandemia - Foto: Óscar Navarro«Los días 5 y 6 de enero están igualando las ventas de antes de la pandemia. Se ha vuelto a la normalidad y la gente tenía muchas ganas de festejar los Reyes con el tradicional roscón. Es nuestro postre estrella o, al menos, eso es lo que nos dicen los clientes. Alargamos la producción una o dos semanas por si alguien quiere repetir. El roscón los rellenamos con nata, crema o trufa, aunque también hay quien se lo lleva sin nada, y nosotros nos diferenciamos porque añadimos como ingrediente las pasas para darle un gusto especial», explica Marta Polo, gerente de las cuatro pastelerías Polo en la capital

La harina, el azúcar, los huevos, la leche, la naranja, la sal y la levadura completan la elaboración de un producto que los pasteleros han procurado elevar mínimamente de precio. «Se ha subido solo un euro el kilo pese a que las materias primas y la energía están por las nubes. Se puede poner una bandeja, envoltorio o caja de cartón más económica y es preferible ahorrar costes en eso porque la gente lo que en realidad quiere es un buen roscón», enfatiza.

Inés Rojo, de panaderías San Francisco, confirma el incremento de ventas este año del Roscón de Reyes. «El día 5 las ventas han sido masivas y es el más fuerte y el 6 sigue la misma línea pero la gente madruga menos. El producto lo venderemos una semana más porque este año subió la demanda. Los roscones hay quien los quiere rellenos, con mitad de nata y mitad de crema o vacíos. Tenemos cinco tiendas en la capital y en todas se han aceptado muy bien», señala.