Después de una vida entera coleccionando, hace cuatro años Rubén de la Fuente y Abraham Nieto se lanzaron a la aventura de diseñar, construir y exponer historias contadas a partir de una cantidad difícilmente contable de figuras de Playmobil. Más de 30.000 piezas se unen en la exposición Playmobil que cuentan historias  en las naves del convento de la Consolación de Calabazanos, en Villamuriel de Cerrato. Unas salas que, hasta que las habitaron estas pequeñas figuras, estaban en condición de abandono, por lo que ambos fundadores de Villaclick (así se llama la asociación organizadora, en la que también participan las parejas de ambos) decidieron ponerse en contacto con los gerentes y monjas del convento, restaurar esta parte del edificio, lo que les ha llevado más de un mes, y usarla como museo.

Tanto De la Fuente como Nieto  afirman que con el pacto firmado con las residentes del convento ambas partes salen ganando. Por un lado, los expositores tienen un sitio en el que mostrar al público sus creaciones. Por el otro, con el evento, los coleccionistas promocionan las visitas al templo. Además, venden pastas hechas por las monjas,y comparten parte de las ganancias obtenidas por la venta de entradas con ellas,. 

La visita está guiada por cinco salas distintas, cada una de ellas con una temática única. En primer lugar, la más antigua, la primera que expusieron: la recreación de los textos bíblicos. La Biblia en un click cuenta sus principales pasajes, tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento, desde la creación en el edén hasta la resurrección de Jesucristo y ascensión a los cielos. «Hace cuatro años nos ofrecieron exponer en una parroquia con la que tenemos muy buena relación. Nos conocían y sabían de la existencia de nuestras colecciones, y decidimos juntar las figuras para ver qué podíamos hacer, y descubrimos que nos podía ir bastante bien. Desde entonces hacemos la de la Biblia todos los años, y en Navidad, nuestro propio Belén. Fue ahí cuando vimos que podíamos hacer mucho más y nos lanzamos a experimentar», aseguran. 

Una manera diferente de contar historias - Foto: Antía IglesiasLa segunda sala de la exposición está dedicada a la historia de Villamuriel de Cerrato, con cinco maquetas que repasan los principales sucesos que han acontecido en la localidad. La tercera, al lejano oeste, con numerosas representaciones de las míticas disputas entre indios y vaqueros.La siguiente a cuentos tradicionales, como Hansel y Gretel.  Por último, una sala dedicada a los más conocidos hitos cinematográficos, desde  Casablanca a Kill Bill. Todas las películas tienen su respectiva  maqueta que representa alguna de sus escenas más famosas, conocidas por la mayoría. Cabe destacar alguna curiosidad sobre esta última sala, como el movimiento constante sobre el eje horizontal de la cabeza de la niña del exorcista, como en la película, o los detalles de Uma Thurman, de la que De la Fuente se muestra orgulloso de manera especial, ya que «una tienda de Playmobil no vende estos productos fabricados, hay que conseguir piezas, montarlo y pintarlo todo desde cero», asegura. Además, pretenden renovar de manera periódica las construcciones, para que «la siguiente vez que alguien venga se encuentre algo distinto a lo que ya ha visto. Esto evoluciona y ya tenemos maquetas montadas en nuestras casas para actualizar el repertorio», declaran. 

«Sabemos que no nos vamos a hacer millonarios con este proyecto, pero tampoco es nuestra intención. Lo hacemos por compartir con los demás nuestra pasión por el coleccionismo, como manera de despejarnos de nuestros respectivos trabajos y estar ocupados en otras cosas. Además, así ayudamos a las monjas del convento, con las que tenemos muy buena relación», afirman De la Funte y Nieto. 

Actualmente en el mundo, en palabras de Rubén, crece más rápido el número de figuras humanas que produce Playmobil que la cantidad de personas de verdad, por lo que asegura que es imposible tenerlas todas. Además, confiesa qu en muchas ocasiones recurren a vendedores de segunda mano. «Especialmente  las piezas especiales o las que son muy grandes, que aquí tenemos unas cuantas, las compramos a vendedores ajenos a la empresa, porque sino el gasto se nos dispararía», confirman.   

Visitas del público

La exposición se puede visitar los martes de julio, agosto y septiembre de 19 a 20,30 horas. Además, los grupos de más de diez personas podrán solicitar una visita en otro horario distinto, aunque los creadores aconsejan contactar con ellos pese a no llegar a dicha cantidad de gente, ya que se puede cuadrar un horario que convenga a ambas partes. La entrada cuesta dos euros, y lleva consigo una explicación guiada de las maquetas. Además, la sección de pasajes de la Biblia cuenta con un audio explicativo a través de un código QR. Se podrá concertar una visita a través de los teléfonos 649 526 302 o 603 452 268.