La  decimonovena edición del fefestival Palencia Sonora vivió otra jornada para recordar  después  de un paréntesis para olvidar, la pandemia, en que puso su granito de arena para que fuera más llevadero. La ciudad respiró vida por cada rincón, con un paisanaje que habrá que esperar un año para volver a encontrar, porque vistosas camisas por doquier y rostros adornados con cristales transparentes o de color no serán fáciles de ver. Será ya coincidiendo con un aniversario redondo, en el que, tal y como merece destacarse de esta entrega, el recinto principal del evento, el parque del Sotillo, el relevo generacional está asegurado por la prensencia de niños en familia -para los menores de 10 años el acceso es gratuito-.

 Intensa jornada de actividades  con un programa de conciertos en el parque del Sotillo en el destacaban las actuaciones de Depedro y León Benaventa hasta la medianoche, porque con la madruagada llegó el turno de Alizzz y Le Boom, entre otros. The Grooves, Colectivo Da Silva y Rusowsky hicieron lo propio, así como Mujeres. Simultáneamente, la zona Dj propuso las sesiones a los platos de Yahaira, Estereobrothers, Say Yes e Inkilino Comunista.

Previamente, distintos espacios del centro de la ciudad acogieron varias citas matinales con la música, un taller creativo para niños y   el tradicional vermú solidario. Así,  en el marco del Sonora Infantil el festival, se volcó con los más pequeños a los que invitó a participar en Barlovento, un taller a cargo de la artista Yanira Castro en el que se estimuló su creatividad a través de juegos, música y performances. Guille Jové fue el encargado de abrir a mediodía los directos en la plaza Mayor, escenario por el que también pasó Los Mejillones Tigre. En la plaza de  San Miguel actuó Ortiga.

La cita musical palentina volvió a refrendar su compromiso social con el tradicional vermú solidario, cuyos fondos irán destinados a la Asociación Española contra el Cáncer. Colaboraron de cinco establecimientos hosteleros de la ciudad ( Maño, La Cántara, Don Jamón, San Remo y Flandes), que ofrecieron alrededor de medio millar de tapas sonoras. 

Esta edición del Palencia Sonora casi ha doblado la superficie del camping con respecto a la última edición en su formato habitual, servicio por el que han optado alrededor de 300 asistentes procedentes de distintos rincones de la geografía nacional.

Desde Valladolid ha llegado un grupo de seis amigos dispuesto a «disfrutar de la provincia palentina y de los buenos artistas del festival», afirma Santiago, quien añade que es la primera que vienen al Palencia Sonora, así como que en los planes de algunos de ellos entra ir al Sonorama y al Boombastic o al Riverland y el Covaleda. De la decimonovena edición de la cita palentina  destacan la banda Carolina Durante, y es que los seis son  «muy fans», a lo que se suma la «proximidad, otro factor importante a la hora de decidir venir al festival».

Alberto, integrante de un grupo  procedente de Cantabria  con asiduos del festival, ya  desde las primeras ediciones, y noveles, explica que entre los atractivos de la cita palentina destaca el formato, que «tiene gancho», además de la cercanía. «El cartel está muy bien -Zahara nos gusta mucho, así como Rufus T. Firefly-», afirma, y la vez valora la organización, el entorno y las actividades paralelas. Si hubiera que poner nota al Palencia Sonora, Alberto -en calidad de portavoz de la pandilla- no duda en  dar un «sobresaliente».

Madrid es el lugar de procedencia del 90% de los integrante -Valladolid el resto- de otro grupo de once usuarios de camping gratuito con la pulsera del festival. Miguel explica que es su cuarta vez en el Palencia Sonora y,  «la verdad, es que nos encanta el sitio y la ciudad». «Lo pasamos muy bien, se está super tranquilo. Es perfecto», asegura.  Del cartel destaca que, es su caso, «cada día hay cuatro o cinco grupos que gustan bastante». Su plan tras charlar con Diario Palentino es disfrutar de los conciertos matinales, tomar el vermú... «Esto es maravilloso», asevera. Además, cuenta que en agenda tienen otra decena festivales.

Después de tres intensas jornadas de conciertos y otras actividades culturales, el Palencia Sonora 2022 bajará el telón de su decimonovena edición hoy. Lo hará en el parque del Sotillo, escenario central por el que han desfilado los principales grupos y artistas invitados, y con las actuaciones de TéCanela (13 horas), considerada una de las bandas de referencia dentro en la nueva canción de autor, y la artista multidisciplinar, actriz, cantante y presentadoraRocío Saiz (14 horas), que presentará ante los aficionados los temas de Amor amargo, su debut en solitario tras su paso por Las Chillers y Monterrosa. TéCanela llega al festival palentino con su segundo disco de estudio, Al borde de la cordura, un trabajo que rebosa energía y optimismo, pero también ironía y crítia social.

El Palencia Sonora está organizado por La Mano Negra y cuenta con el patrocinio del Ayuntamiento, la Diputación  y la Junta de Castilla y León. Prestan también su apoyo la Universidad de Valladolid y su Centro Buendía, el Carné Joven Europeo y San Miguel, además de la Muestra de Cine Internacional de Palencia.