La ayuda de un bombero fuera de servicio fue clave ayer para mantener con vida a un hombre de unos 45 años que habría sufrido un infarto en la orilla del río. Sin dudarlo, le practicó una reanimación cardiopulmonar en la que, según testigos presenciales, se unió también una ciudadana que pasaba por el parque y, más tarde, dos agentes de la Policía Local hasta la llegada de los servicios sanitarios, que lograron estabilizarle para ser trasladado al Caupa. / c.h.s.l.