¿Qué balance hace de este curso en la Escuela Taurina de Palencia?
Estamos muy contentos del trabajo que hemos estado haciendo durante el invierno de cara a su preparación y a la temporada que se avecina, que es bastante importante.
Ha sido un invierno importante, con un entrenamiento fuerte. El balance del curso es muy positivo porque hemos conseguido también que los chavales nuevos hayan progresado mucho.
Además, hemos estado presentes en varios bolsines como el de Coria (Cáceres), Ledesma (Salamanca) o Rasines (Cantabria), además del Encuentro de Escuelas Taurinas Villa de Ampudia que organizamos nosotros. Todas estas citas son muy importantes para la preparación de los alumnos.
Se avecina un verano movido para los chavales con varias tardes ya confirmadas
A partir de la clase práctica en Campos Góticos, hay ya varios compromisos en la provincia. Arrancaremos con Guardo (12 de junio, 18 horas), donde toreará Juan Alonso; y seguiremos con Grijota (donde hace diez años que no se daban toros), Villada, Herrera de Pisuerga y Saldaña. También puede que vayamos a Astudillo y Baltanás.
Es de agradecer que los ayuntamientos pidan a los empresarios que la Escuela Taurina de Palencia esté presente, y eso quiere decir que la cosa va funcionando, que a la gente le gusta y que quiere que los chavales participen en las novilladas de sus pueblos. Para nosotros eso es muy importante. Sin el apoyo de los pueblos, nuestro trabajo sería más difícil.
Esto demuestra también el gran trabajo que se está realizando desde la Escuela
Uno de nuestros cometidos es acercar los valores del toro a la sociedad y lo estamos consiguiendo. Queremos devolver a Palencia lo que en su momento fue, una provincia muy taurina. Tanto desde la Escuela como desde la Asociación Cultural Taurina promovemos y divulgamos la tauromaquia por el mundo rural para que aquellos pueblos que han sido taurinos vuelvan, poco a poco, a dar toros.
¿Dan por cumplidos los objetivos que se marcaron en la Escuela y la Asociación cuando echaron a andar?
Los objetivos están más que superados porque en apenas tres años, y con una pandemia de por medio, la Escuela Taurina de Palencia está entre las mejores de España. En cualquier escuela que hables de nosotros nos tienen con un concepto extraordinario.
Intentamos hacer las cosas bien, poco a poco y con respeto para que vean que somos serios en nuestro trabajo. Además, estamos en comunicación con todas las escuelas, con mayor afinidad con Salamanca o Badajoz.
¿Cómo ha evolucionado el número de alumnos?
Empezamos con cinco o seis, pasamos a una docena y ahora estamos sobre 25. Un inicio informal y de repente te encuentras con que es un trabajo porque hay que atender a muchos alumnos y necesitas ayuda de más gente, en este caso de Mario Campillo y Raúl Gómez. Estamos con muchas ganas y con la ilusión de convertir en toreros a chavales de la zona.
Hay un grupo que está progresando bien, y algunos sorprenden, aunque tienen muchos altibajos hasta que aprenden el oficio bien. Esto no es un año o dos, es un aprendizaje constante. Hay cuatro o cinco alumnos aventajados entre los que se encuentran los palentinos Juan Pérez, Juan Alonso, Guillermo Alonso o Ángel Santamaría, y algún otro de fuera.