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El Consejo de Gobierno de la Junta autorizó ayer, por un importe global de 85.007.138 euros y tramitación anticipada, la licitación del contrato para terminar de construir la fase I  -bloque técnico- de las obras del hospital Río Carrión, que tendrán un plazo de 30 meses para su ejecución desde el momento de su adjudicación, según informó la Junta. 

La construcción de la fase I del bloque técnico del hospital Río Carrión está prevista en el Plan de Inversiones Sociales Prioritarias 2021-2025. La necesidad de la contratación de esta obra se fundamenta en el plan funcional aprobado por Sacyl, de acuerdo con las necesidades asistenciales en la atención hospitalaria de la provincia. 

Como se sabe, las diversas fases previstas deben garantizar el normal funcionamiento del hospital, lo que condiciona en gran medida la solución. Por eso, el proyecto integra el edificio de consultas, ya construido, y prevé en sucesivas fases el bloque técnico que será licitado, la hospitalización, el edificio de recepción y el área psiquiátrica. 

Asimismo, y de manera paralela a la licitación del bloque técnico, se abordará la unidad de radioterapia, prevista para la última fase, pero que se ha visto adelantada. En total se prevé una nueva edificación hospitalaria de 25.126 metros cuadrados, distribuidos entre los 20.709 del bloque técnico, 3.419 del edificio industrial y otros 998 de la nave almacén. 

El plan de terminación cuya ejecución de obra ahora se pondrá a licitación fue redactado con el objetivo de actualizar el proyecto no ejecutado por el anterior adjudicatario, reflejando los siguientes puntos: Eliminar del proyecto la parte de obra ya ejecutada y ocupada, correspondiente al aparcamiento y la nave almacén, junto con las obras de demolición y retirada de residuos de la parcela del hospital. Deberá adecuarse a la normativa, ya que, aunque el proyecto tiene concedida la licencia municipal en el año 2018, algunos avances normativos producidos desde la redacción inicial resultan ineludibles, en especial los relativos a la eficiencia energética de la climatización o la protección del cableado y una actualización de precios de obra dado el tiempo transcurrido desde la redacción del proyecto (2015) y las actuales circunstancias coyunturales del sector de la construcción. 

El bloque técnico supondrá un salto de calidad muy importante en la asistencia sanitaria a la población de Palencia; no obstante, el inicio de la licitación y posteriormente su construcción, no será óbice para que se sigan acometiendo las reformas necesarias en las instalaciones actuales que garanticen esta asistencia sanitaria de calidad que se persigue, como pueden ser: reforma del servicio de urgencias (en ejecución), instalación de climatización en las habitaciones, cambio de las tuberías del ACS, intervención en la cubierta de hospitalización, o reforma de alguno de los quirófanos.

PARA EL VERANO. El delegado territorial de la Junta, José Antonio Rubio, avanzó ayer a DP que si todo transcurre bajo los cauces previstos es más que probable que para el próximo verano comiencen las obras tras la correspondiente adjudicación.

Cabe recordar que el primer contrato fue adjudicado a Ferrovial Agroman-Constructora Peache el 28 de agosto de 2017 por un importe de 36.176.093 euros a financiar en cuatro años, es decir, hasta 2020, incluido. El plazo previsto para la ejecución de la primera fase, la construcción del aparcamiento, era de siete meses y se realizó en más de 11. A día de hoy, ha sido lo único terminado y las certificaciones presentadas con importe económico ascendieron a 1.983.175,79 euros, el 5,5% de ejecución total del contrato. La Junta concedió a la UTE dos meses más de plazo y, aún así, se produjo una demora acumulada de 68 días en la ejecución de la obra. El bloque técnico, propiamente dicho, se debía ejecutar en 33 meses y antes de empezar ya se había consumido más de nueve, el 27,88% del plazo, sin que se hubiese hecho nada.

La administración regional echó cuentas y se percató de que después de 610 días, Ferrovial Agromán y Peache había consumido el 50,83% del plazo total del contrato sin avances significativos, apenas el 5,48%, por lo que a juicio de la Junta «era razonable presumir la imposibilidad de cumplir el plazo de la fase dos y, en consecuencia, el total del contrato». 

La radioterapia podría comenzar a ver la luz a comienzos de 2023

Como indicó ayer el Gobierno regional, de manera paralela a la licitación del bloque técnico del hospital Río Carrión, se abordará la unidad de radioterapia, prevista para la última fase, pero que se ha visto adelantada.

En este sentido, la Junta, a través de la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Palencia, encargó a finales de octubre a la empresa vallisoletana Tello Cardenal Arquitectos (TCU) la redacción del anteproyecto de la unidad satélite de radioterapia para el Complejo Asistencial Universitario (Caupa).

La administración regional abonó 18.029 euros a esta firma para que en el plazo de un mes, que ya ha cumplido, entregue el documento que servirá de punto de partida para la realización del proyecto constructivo, aún pendiente de licitación.

La Junta desligó la construcción de la unidad satélite de radioterapia de la construcción del bloque técnico, aunque Tello Cardenal Arquitectos, junto a  Aidhos Arquitec, firmó el proyecto básico y de ejecución para la construcción del bloque técnico del nuevo hospital. Precisamente, el pasado junio la Junta encomendó a estas empresas la modificación del contrato de dirección facultativa de las obras con el fin de volver a licitar el proyecto, que en el Consejo de Gobierno autorizó ayer.

Durante la presentación de la décima edición de la Carrera contra el Cáncer el pasado mes de septiembre, la cuestión de la construcción de una nueva unidad de radioterapia en Palencia salió a escena. Al respecto, Rosa Andrés, presidenta de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) de Palencia, afirmó en aquella ocasión que, según le transmitieron, «tenemos el compromiso de la Junta de que antes de finalizar el año comience la construcción de la nueva unidad de radioterapia». 

Andrés consideraba entonces que eran positivas las gestiones que se estaban realizando, aunque continúa escéptica a la espera de que se haga realidad el proyecto. 

«Ya toca que nuestros pacientes no tengan que desplazarse a Valladolid o a Burgos a recibir los tratamientos. Vamos a ser los penúltimos de España en disponer de este servicio», destacó. «La sanidad en Palencia está un poco abandonada y es necesario que lleguen ya fondos», añadió al respecto Rosa Andrés.