La empresa palentina Facundo, fundada el 27 de noviembre de 1944 con un capital de 90.000 pesetas, celebra su 75 aniversario con una edición especial de sus pipas, con un cuidado packaging dorado, donde el consumidor puede encontrar el logo de la efeméride. Además, también podrán participar en diversos sorteos y promociones.

Con tres cuartos de siglo a sus espaldas, Facundo no solo ha sido testigo de la historia, sino que ha formado parte de ella, convirtiéndose en uno de los fabricantes de aperitivos «más célebres» del país y en un motor de crecimiento y empleo para la Comunidad donde está asentada.

El aniversario se cumple con la vista puesta en el desarrollo de nuevos productos, la innovación y la responsabilidad social corporativa como pilares centrales de la firma palentina. Actualmente, la empresa sigue desarrollando nuevos productos como el R3Mix, una mezcla de aperitivos con sabor barbacoa con muy buena aceptación por el mercado, y el Glups, un aperitivo bebible y divertido que colorea la lengua, un producto diferencial dentro de su categoría.

Asimismo, Facundo trabaja en el desarrollo de nuevos productos para satisfacer las diferentes necesidades, po lo que, en breve, realizará un lanzamiento dirigido a un público adulto en la línea de la salud y el bienestar pero que la vez pueda darse un capricho. 

Facundo Blanco lleva 75 años siendo referente en crear los mejores frutos secos y aperitivos para disfrutar, con el objetvo de ser una empresa imaginativa, ingeniosa, socialmente responsable y atrevida, que permita sorprender constantemente a sus clientes con productos exquisitos y sabrosos, compatibles con un estilo de vida saludable y que son capaces de atrapar a un público fiel, a través de sus marcas de las que cada año se consumen más de 80 millones de bolsas.

El 27 de noviembre de 1944 nació Facundo en Villada, de la mano del matrimonio formado por Lola y Facundo. Con ellos surgió una empresa familiar dedicada a la fabricación y venta de frutos secos, todo ello durante la posguerra y con las pocas posibilidades para la alimentación de libre comercio, ya que la mayoría de los productos estaban intervenidos.

fuerza y tesón. No obstante, los frutos secos sí que permanecían libres y, especialmente, las pipas de girasol. Facundo y Lola vieron ese nicho de mercado y lo acometieron sin capital propio y partiendo de un crédito inicial de 90.000 pesetas del Antiguo Banco Hispano Americano.

A base de fuerza y tesón iniciaron un bonito proyecto de empresa que, además, satisfacía unas necesidades de alimentación sana a un precio realmente atractivo y cubría los tiempos de ocio y diversión y fomentaba los consumos de grupo. Unos inicio y camino duro hasta los tiempos actuales, con las nuevas gamas de productos.