El 2 de octubre de 1922 se inauguró la Escuela de Artes y Oficios de Palencia, ubicada en las instalaciones del llamado Instituto Viejo, en la bajada de Puentecillas. Ayer, un siglo después, el salón de actos de la biblioteca acogió el primera cita conmemorativa, que reunió en una mesa redonda en torno a la actual Escuela de Arte y Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales Mariano Timón a Luis Alonso Muñoz y Luis Alonso Rioja (ambos con experiencia en la dirección del centro); José Antonio González (autor de un libro sobre el edificio del dispensario antituberculoso y antivenéreo de Palencia, hoy sede de la escuela); Julio Estrada Nérida (viudo de Carmen Trapote, quien fuera secretaria del centro y coautor de una publicación sobre la Mariano Timón); y Nieves Pérez Manso (jefa del Departamento de Historia del Arte) como moderadora.
María Aranzazu Rebollo, directora de la Escuela, destacó la «importancia» de la celebración, y es que «no muchos centros pueden enorgullecerse de cumplir 100 años». Una efeméride que «implica muchas cosas», afirmó -en referencia a la formación de generaciones de alumnado, profesorado y directores que han pasado, así como «estudios diferentes que se han impartido, como dibujo lineal, composición decorativa, escultura, metalistería, vaciado, carpintería y cerámica, hasta llegar a los actuales y que se han ido actualizando y adaptando a las necesidades de la juventud».
Cursan estudios en la Mariano Timón unos 200 alumnos. Imparte Bachillerato de Artes, Conservación y Restauración de Bienes Culturales especialidad Textiles y los ciclos de Artes plásticas y Diseño de grado superior de Joyería Artística, Ebanistería Artística, Arquitectura efímera e Ilustración.
Estos últimos se implantaron el curso pasado, y han tenido buena aceptación. Así, en Ilustración se han matriculado 17 alumnos y Arquitectura efímera 10. «Todo un éxito», afirma Rebollo, y es que «al principio no sabes si van a funcionar. Estamos muy contentos». La Mariano Timón es el único centro de España con restauración de Textiles, este curso con seis nuevos alumnos.
Una vieja reivindicación es la de tener unas nuevas instalaciones, en la que la directora de la Mariano Timón habla de «ninguna esperanza» en que se cumpla, si bien es cierto que «sí son necesarias, porque estamos muy justitos para ubicar aulas y alumnos, además del inconveniente que representan las dos sedes, algo que complica mucho el día a día -seis-siete profesores que van y vienen-».