Tablas en Galicia

Área 11
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El Palencia Cristo Atlético se trajo un punto del Municipal do Vao vigués, en un encuentro en el que el conjunto de Chuchi Jorques supo anular por completo el ataque local. La mala noticia, la lesión de Duque

Chuchi Jorques da instrucciones a sus jugadores durante el partido de la segunda jornada disputado en La Balastera ante el Polvorín, filial del Lugo B. - Foto: Óscar Navarro

El Palencia Cristo Atlético sumó un punto en su visita a Vigo, en un partido en donde supo controlar a su rival. Y es que el Coruxo tuvo más balón y buscó más la puerta contraria, pero lo hizo sin ningún éxito. Las jugadas de los locales morían siempre al borde del área ante un Palencia bien colocado que no dio opciones a su rival y consiguió, así, llevarse un valioso punto de O Vao.

No fue una buena primera parte, llena de imprecisiones por parte de ambos equipos, y con muy pocas ocasiones de gol. El Palencia Cristo Atlético sabía que, si quería llevarse algo positivo del campo de O Vao, tenía que conseguir que los jugadores vigueses no estuvieran cómodos sobre el terreno de juego, que no tuvieran el balón. Por ello, Chuchi Jorqués le ordenó a su equipo que presionara muy arriba la salida de balón de los locales, tratando que los jugadores del Coruxo tuvieran muchos problemas para poder sacar el balón controlado. 

Lo consiguieron por momentos, ya que posiblemente ninguno de los dos equipos contaba con el intenso calor hizo ayer en Vigo, con una temperatura que rondaba los treinta grados y que agobio a propios y extraños.

No había un dominador claro. El esférico circulaba con velocidad de un lado al otro del campo, pero escapaba de las áreas, en las que los dos guardametas no tuvieron un excesivo trabajo durante los primeros cuarenta y cinco minutos de juego. 

No obstante, era el cuadro local el que llevaba mas el peso del encuentro, pero cada vez que lo intentaba se encontraba con la seriedad defensiva de los palentinos, que no dejaban huecos para que los aprovecharan los jugadores locales.

Así fueron pasando los minutos en un partido en donde no había sensaciones de peligro, algo que beneficiaba a un Palencia que, por lo menos, tenía un punto en el bolsillo, dejando la puerta abierta a una contra con la que sorprender al equipo gallego.

Segunda mitad. Tras el paso por el vestuario salió mucho más fuerte el conjunto local, que tenía más el esférico y se volcaba en busca del área contraria. Sin embargo, el Coruxo mantenía los mismos problemas del primer tiempo: los gallegos tenían la pelota y la movían bien, pero era incapaces de pasar de la frontal del área. 

El Palencia no había cambiado de táctica y se mantenía firme en defensa, bien plantado sobre el terreno de juego, abortando las llegadas locales y esperando una contra para romper el partido. Pero no es menos cierto que los vigueses también estaban muy bien colocados en defensa, no dejando que el Palencia creara peligro. Las ocasiones seguían sin llegar.

A medida que pasaban los minutos, la situación beneficiaba a un conjunto palentino que veía cómo el Coruxo comenzaba a desesperarse y precipitarse, abusando de balones en largo que casi nunca llegaban a encontrar un rematador. Además, los jugadores palentinos estaban muy atentos a todos los balones largos, y se anticipaban una y otra vez para evitar el peligro.

Al final, reparto de puntos en un partido en donde casi todo el juego se desarrolló en el centro del campo, con dos defensas muy bien colocadas sobre el terreno de juego, y con muy pocas ocasiones de gol.

El Palencia Cristo Atlético recibirá la próxima jornada en La Nueva Balastera al Bergantiños gallego el domingo a las 17 horas.