Víctor Corcoba

Algo más que palabras

Víctor Corcoba


Unos con otros

08/11/2022

Nada está predeterminado, todo se puede modificar. Si el cultivo del arte nos pone alas creativas, también las letras como las ciencias son una herramienta muy valiosa para comprender el mundo que nos rodea. Sin duda, son esos orbes, ya sea el científico o el literario/artístico, el que nos pone en camino del asombro, para no dejar que la vida de los pueblos se reduzca únicamente a un juego entre los poderosos. 
Hoy, en la sociedad globalizada, se requieren de otras siembras más cabales que nos fraternicen, poniéndonos en disposición de suprimir las guerras de la faz de la tierra. Nunca han tenido sentido los combates. Tenemos que derrotar a las fuerzas del mal. Son una ruina destructiva, que aparte de matarnos el corazón, nos dejan enfrentados. 
La paz espera con urgencia a sus artífices. Es cuestión de estar unos con otros, pero jamás unos contra otros. Tal vez, para ello, debamos reforzar nuestra propia sensibilidad sobre los vínculos, cultivando una actitud de unión y no de división, de actitud contemplativa y no devastadora, de cercanía y de comprensión en suma. 
Afortunadamente, el planeta aún está a tiempo de modificar espacios adversos. Indudablemente, tenemos que reorientarnos como casa común, pero también tenemos que juntarnos para reflexionar sobre cómo volver a un futuro más esperanzador, donde todos formemos parte, dejando oírnos y aprendiendo a escucharnos. 
Crear conocimiento y comprensión a través de los caminos de profundización recorridos, nos equipa para hallar soluciones a los agudos desafíos económicos, sociales y ambientales de la actualidad, mejorando de este modo nuestras propias agrupaciones. Corre prisa hacerlo, porque no hay ética sin estética como tampoco economía saludable sin un astro sano. 
Hemos de regresar cuanto antes al boscaje del verso, a la forestación de la palabra correspondida, al territorio del alma que se entrega, reviviendo otros ámbitos más equitativos. Veámonos en el mundo, cuando menos para forjar otros horizontes más níveos, que conlleven esa dimensión poética que nos hace crecer en la inspiración y en el trabajo conjunto. Manos a la obra, pues.  

ARCHIVADO EN: Arte, Estética, Economía