Trabajo sanciona con 8.196 euros a la empresa de Dueñas en la que falleció un trabajador en marzo. «Partiendo de la premisa de que la vida no tiene precio, resulta indignante comprobar que, tras constatarse incumplimientos en prevención de riesgos laborales, para determinados poderes públicos la vida de una persona cueste 8.196 euros», lamenta CCOO, que presentó el 7 de agosto la correspondiente denuncia.
«Estas resoluciones trasladan el mensaje, desafortunado e irresponsable, de que resulta más rentable pagar las sanciones que invertir en los recursos necesarios», añade.