Carriedo admite que el PIB crecerá por debajo del 1,6%

SPC
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El consejero de Economía y Hacienda asegura que el «tsunami presupuestario» del Covid-19 ha obligado a la Junta a redistribuir sus cuentas para este año, que ya tenía elaboradas

El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, interviene en la rueda de prensa telemática. - Foto: JCYL

La Junta de Castilla y León tendrá que rediseñar de nuevo el Presupuesto General de la Comunidad para adaptarse a la nueva realidad surgida tras el estallido del coronavirus. De esta forma, todo el trabajo que durante meses había venido desarrollando la Consejería de Economía y Hacienda para elaborar las cuentas autonómicas de este año –en 2019 se prorrogaron las del ejercicio anterior– tendrá que ser revisado por completo para ajustarse al escenario que surja tras la pandemia. Una reformulación económica que, de primeras, contemplará un crecimiento del PIB de Castilla y León inferior al 1,6% estimado por la Junta en la presentación del techo de gasto no financiero –fijado en 10.167 millones– hace unas semanas.

Así lo confirmó ayer el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, que destacó que la crisis del coronavirus trae consigo un «tsunami presupuestario» que le obligará a reconsiderar las bases del borrador que ya tenían elaborado de las cuentas de este año, porque «desconocen la previsión definitiva de ingresos y gastos». «Hasta que no finalice la crisis y conozcamos su alcance no lo elaboraremos y fijaremos el momento para su presentación», aseguró el titular de Economía en una rueda de prensa telemática junto a la consejera de Sanidad, Verónica Casado, informa Ical.

Carlos Fernández Carriedo recordó que habían elaborado unas cuentas conforme a un techo de gasto que ya habían aprobado las Cortes, pero esas bases, «no se ajustan a la realidad sobrevenida, por la crisis». Al respecto, constató que las previsiones macro ya no sirven, porque habían previsto una desaceleración de la economía hasta el 1,6 por ciento, un dinamismo «justo la mitad que hace dos años», pero «hoy ya nadie estima un crecimiento así y, por lo tanto, en todo caso, tendremos ingresos menores de los previstos en el techo gasto, y la distribución de gastos muy distinta, ya que será mucho mayor en los ámbitos sanitario y social».

Carriedo constató que ya tenían «elaborado y preparado» todo el presupuesto de la Comunidad, el texto articulado había sido remitido al Consejo Económico y Social (CES) para su informe una semana y media antes de la declaración del estado de alarma. Así, sentenció, que sino se hubiera producido esta crisis sanitario, ya hubieran presentado esta semana las cuentas a las Cortes.

Más recursos a sanidad.

Fernández Carriedo también insistió en que la nueva situación obligará a destinar más recursos a sanidad y servicios sociales, así como al apoyo al empleo, y recordó que en el último Consejo de Gobierno aprobaron limitar las actuaciones menos urgentes, para poder destinar a financiación a la lucha contra el coronavirus.

En este sentido, exigió «sensibilidad» al Gobierno de España con recursos adicionales para las autonomías, porque tendrán que asumir el «mayor gasto de esta crisis» con sus competencias en sanidad, servicios sociales y políticas activas de empleo, y sufrirán un «impacto muy relevante» en sus ingresos por la crisis económica que se derivará de la situación actual y de la que aún «se desconoce su alcance».