Editorial

Un museo para afianzar la memoria ferroviaria de Venta de Baños

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Ha costado muchos años de esfuerzo poner en pie esta dotación única en Castilla y León

El Museo del Ferrocarril, único de estas características en Castilla y León, abre sus puertas en Venta de Baños para satisfacción del Ayuntamiento, de Avenfer, de los vecinos de la localidad, los aficionados al tren y quienes visiten la provincia. Porque no solo nace como memoria de la historia de un pueblo, que creció, se desarrolló y prosperó al albur del transporte ferroviario, sino como un recurso turístico con aspiraciones de competir con los mejores. Ha costado casi tres décadas ponerlo en pie, años de esfuerzos altruistas, de peticiones, de búsqueda de fondos, de acondicionamiento de La Briquetera y de consecución de piezas históricas, pero se ha conseguido y es un orgullo para los venteños. Informativo, didáctico, rico en elementos específicos de una profesión y hasta de un modo de entender la vida, profuso en hitos relacionados con uno de los medios de transporte que más ha evolucionado, y con una estructura sencilla que conecta bien con el espectador, el nuevo museo, inaugurado ayer oficialmente, se estrena con jornadas de puertas abiertas.

Quien no haya reparado demasiado en la interesante historia de los ferrocarriles españoles, quizá se pregunte qué va a encontrar en el flamante museo. La respuesta en bien sencilla: vagones antiguos de madera, una maqueta, maquinaria y aparataje de todo tipo -mesa de enclavamientos eléctricos para el cambio de agujas, equipo hidrométrico, teléfono de señales, cartera de herramientas, lámpara de carburo o botiquín de vagonetas, entre otros-, pero también un tren a escala en el que pueden dar paseos los niños y paneles con información. Recoge y muestra lo más significativo de los 163 años de presencia del tren en la localidad cerrateña.

Es una forma de complementar una visita a la zona, que hasta ahora solía circunscribirse a la basílica visigótica de San Juan en Baños de Cerrato. Ya no habrá que pasar de largo por Venta de Baños o hacer coincidir el viaje con las fiestas patronales. El Museo del Ferrocarril abre el horizonte como un recurso turístico, que aspira a seguir creciendo hasta convertirse en parada imprescindible en los tours por la provincia. Quizá no tenga el mismo recorrido que otros recursos mucho más conocidos y popularizados, como las villas romanas, los monumentos religiosos y civiles más significativos, los centros temáticos que jalonan Palencia de norte a sur y de este a oeste, construcciones como el Canal de Castilla o rutas como la de los templos del Románico Norte, el Camino de Santiago y el Lebaniego o las de carácter natural en comarcas como la Montaña. Eso, el tiempo lo dirá. De momento tiene que abrirse paso  en la oferta general, hacerse un hueco y gestionar de manera óptima su divulgación. Y seguro que en las sucesivas ediciones de ferias turísticas como Intur y Fitur, puede ofertarse con entidad propia. Es bueno e importante.