La sexta ola de la pandemia pasará a la historia como la de la variante ómicron, que trajo consigo un buen número de contagios, aunque por suerte una gran parte de los mismos sin mayor trascendencia salvo que otra vez se volvieron a colapsar los servicios de Atención Primaria y Urgencias del complejo hospitalario, lo que evidentemente redundó para mal en las listas de espera, consultas especializadas y programación quirúrgica.

Con todo, enero dejó la friolera de 12.855 positivos declarados, lo que supone una media diaria de 414 y, lo que es peor, 39 fallecimientos, lo que supone a más de un muerto por día.

Los expertos sanitarios indicaron que las vacunas están haciendo su trabajo. De hecho, como ya publicó este periódico en su momento en declaraciones de la jefa del servicio de Microbiología del hospital Río Carrión, María Antonia García Castro, «de no haber sido por las vacunas, ahora estaríamos contando por miles los muertos en la provincia por culpa del coronavirus».

Fuentes sanitarias indicaron ayer que el número de pacientes ingresados en planta oscilan entre los 50 y 60 (las altas y los ingresos son cambiantes a diario), mientras que hay otros seis que se encuentran en la Unidad de Cuidados Intensivos. 

Asimismo, finalizaron el lunes en Venta de Baños y Dueñas los cribados que se han llevado a cabo en la provincia con test antígenos a través de una unidad móvil contratada para esta ocasión por la Junta de Castilla y León y que ha funcionado durante el último mes.

En total se han efectuado 21 cribados con la unidad móvil, que han recorrido todas las zonas básicas de salud de la provincia, incluso alguna de ellas en dos ocasiones como Villamuriel de Cerrato. Según los datos aportados, un total de 3.866 personas han participado en las mismas y, de ellas, 387 han sido positivas a coronavirus, es decir, el 10 por ciento del total

El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, anunció a comienzos de enero la realización de test de antígenos con 12 unidades móviles en la región, con las que aspiraba a materializarse 200.000 pruebas a lo largo del primer mes del año, además de las que se sigan desarrollando en los puntos fijos.

PERSONAL SANITARIO. De esta forma se pretendía descargar a la Atención Primaria de este tipo de tareas y «acercar la realización lo más posible a la población general», explicó el consejero, quien remarcó que este trabajo en las unidades móviles estaría realizado por personal sanitario y en todas las provincias. Las pruebas estaban destinadas a aquellas personas que sufrían síntomas compatibles con covid-19.

Según informó ayer la Delegación Territorial de la Junta los cribados han finalizado ya en la provincia. A tenor de los resultados, se puede calificar de un éxito el  proyecto.