Al Deporcyl Fuentes Carrionas de la Primera División femenina de balonmano le puede acabar pasando lo que le ocurrió al Palencia Cristo Atlético, una permanencia disfrazada de ascenso.

La RFEF estructuró las categorías, dividiendo la Segunda B en dos divisiones, Primera RFEF y Segunda RFEF. El club morado alcanzó el ascenso, pero a una categoría, la cuarta del fútbol español, que ya tenía. No se les permitió a los equipos que despuntaron en Tercera optar a luchar por la Primera RFEF.Peor fue los que bajaron de Segunda B, como el Guijuelo, ya que descendieron dos categorías de golpe, de la tercera a la quinta división.

Pues bien, en el balonmano femenino español se avecina algo parecido cara a la próxima temporada. La idea es formar una nueva categoría, por debajo de la máxima competición, la Liga Iberdrola. La actual División de Honor plata mantiene la denominación, pero pasará a ser la tercera categoría, con cuatro grupos de doce equipos.

Deporcyl, como posible campeón de grupo de Primera División (está imbatido) luchará por la fase de ascenso a División de Honor plata. Es decir, a ascender a una tercera categoría en la que ya está. Palencia Turismo seguiría en Primera, pero en la cuarta categoría, no la tercera.