Pilar Cernuda

CRÓNICA PERSONAL

Pilar Cernuda

Periodista y escritora. Analista política


Una cumbre que levanta ampollas

31/01/2023

Este miércoles se inicia en Marruecos una cumbre que remueve las estructuras socialistas españolas, aunque hace tiempo, ya que esas estructuras se han sometido a los designios del presidente de gobierno.

Hace once meses, Sánchez cambió drásticamente la posición que había mantenido el PSOE respecto a Marruecos, haciendo suya lo que siempre había exigido Mohamed VI y, antes, su padre Hassan II: reivindicar un Sahara marroquí, con un estatuto de autonomía. Ha sido probablemente el giro político que más ha decepcionado al socialismo español, aunque el sanchismo no se mueve un ápice de la línea marcada por su líder. Días atrás, no respaldaron la resolución del Parlamento Europeo contra Marruecos, y Sánchez ha mantenido la fecha de la reunión, aunque Bruselas pidió a sus eurodiputados que cancelaran sus visitas a Marruecos y Qatar, como respuesta a los casos de sobornos de esos dos países a parlamentarios europeos.

La cita de los días levanta ampollas en las filas socialistas, pero Sánchez no se inmuta. No le acompañarán los ministros de Podemos, que se han negado a sumarse al encuentro hispano marroquí. Sí acudieron varios de sus dirigentes al congreso del Polisario que se celebró hace dos semanas en los campamentos de Tinduf, en el que fue reelegido máximo líder Brahim Ghali, cuyo viaje clandestino a España para ser tratado de covid, provocó una crisis sin precedentes. Precisamente para hacerse perdonar la acogida a Ghali y sus graves consecuencias es por lo que Sánchez cambió de posición respecto al Sahara.

Desde ese día, se han sucedido los gestos de amistad del gobierno español hacia Rabat. Ni una queja por el espionaje de Marruecos a miembros del gobierno español, incluido el presidente a través de Pegasus, tampoco el acoso al periodista Ignacio Cembrero, y tampoco se ha quejado Moncloa del retraso de la apertura de las aduanas de Ceuta y Melilla. Al contrario, el gobierno español reitera las buenas palabras sobre la colaboración supuestamente extraordinaria de las fuerzas de seguridad marroquíes para colaborar contra la inmigración ilegal y la lucha contra el terrorismo. España ha echado el resto para contentar a Marruecos, hasta el punto de que plantea la apertura de un instituto Cervantes en el Sahara, lo que ha sido recibido con regocijo por el Marruecos oficial.

Marruecos se va a volcar en la reunión, y es probable que se produzca el encuentro entre Sánchez y Mohamed VI, de tal manera que el presidente español podrá vender la reunión como el punto de partida para que las relaciones bilaterales se consideren privilegiadas. Sánchez podría justificar así su cambio de posición respecto al Sahara, que escuece en el Psoe y ha tenido graves consecuencias en el campo energético porque Argelia está a la espera de que se cumpla el plazo del contrato de venta de gas a España para hacer patente su malestar por defender un Sahara marroquí.

No han sido fáciles las relaciones con Marruecos, pero España nunca había cedido a las exigencias del rey Mohamed.