La inversión del Ayuntamiento en el cementerio de Nuestra Señora de los Ángeles rondará los 584.000 euros al finalizar el presente año, cantidad que se ha destinado mayoritariamente a las obras de urbanización de la ampliación del recinto. Los 405.955 euros destinados a este proyecto han permitido que el camposanto capitalino disponga de espacio para 1.380 sepulturas.

Las 33 primeras ya están en camino, ya que la comisión de Obras ya ha dado cuenta del proyecto para su construcción, lo que permitirá paliar el déficit que existe en la actualidad con una inversión prevista de 48.398,6 euros.

Y es que, a día de hoy, el cementerio de Nuestra Señora de los Ángeles tan solo dispone de 17 sepulturas vacías, ocho de tres cuerpos    -este año se han reparado seis-, y nueve de cuatro. Además, hay 16 nichos contando los 13 que se han recuperado este año, y tan solo un columbario. Precisamente, el Ayuntamiento ya está trabajando en ampliar estos espacios, ya que se están construyendo 104 nuevos nichos y 80 columbarios gracias a una inversión de 96.525,8 euros.

La limitación de espacio en el camposanto se debe a su forma de gestión. El Ayuntamiento, propietario del terreno, lo alquila a través de concesiones a los ciudadanos. Desde 1944, año en el que se inauguró, hasta 2004, el plazo era de casi un siglo, de 99 años para ser exactos. Por lo tanto, las cesiones de uso más antiguas no caducan hasta 2043. A partir de 2004, el Ayuntamiento lo redujo a 75 años.

El caso de los columbarios es distinto, ya que las concesiones son por una década. Precisamente, durante este mes están caducando los primeros derechos y el Ayuntamiento está dando opción a los ciudadanos a ejecutar la primera de las tres prórrogas de cinco años posibles. En estos casos, no es extraño que las familias opten por sacar las cenizas para trasladarlas a otro lugar.

Mejoras. A estos desembolsos hay que sumar otros destinados a mejorar su servicio, como el arreglo de paseos y espacios comunes y la renovación de contenedores (1.055,6 euros), y otros previstos a corto plazo, como la adquisición de un dumper (29.000 euros), de dos escaleras para acceder a los nichos (3.000 euros), la colocación de mobiliario urbano, el acondicionamiento del osario y continuar con la rehabilitación de la antigua vivienda del capataz para transformarla en aseos y el archivo municipal.