Los bares, restaurantes y casas de comidas se han convertido en los mejores vecinos de los pueblos y en Cervera de Pisuerga lo saben bien. En este hermoso pueblo de la Montaña Palentina son varios los negocios hosteleros que aún se mantienen en pie para ofrecer sus servicios a vecinos y foráneos, pero si hay uno que llama especialmente la atención ese es el hotel restaurante Peñalabra. 

Allá por 1930 abrió sus puertas este negocio; fueron los padres de Gaspar Santos quienes lo fundaron e inculcaron a su familia la tradición de gestionar un buen restaurante. Desde entonces han sido muchos los comensales y los huéspedes que han pasado por el número 72 de la calle Labradores y han disfrutado de todos y cada uno de sus servicios.

Desayunos, comidas y cenas no faltan, a lo que se suma la posibilidad de tomar un vino, una caña o un refresco.

A la hora de saciar el apetito los comensales pueden degustar exquisitos guisos caseros y tradicionales, aderezados con mucho cuidado, pequeños toques modernos y unas materias primas de excelente calidad.

Las carnes de Cervera se mezclan con la menestra palentina, sin dejar de lado los suculentos postres que a diario se elaboran en la cocina de este restaurante.

Pero si hay un plato famoso por excelencia es el elaborado con caracoles. Sabroso es un adjetivo que se queda corto para describir este manjar que muchos saben apreciar, de ahí que sea uno de los más solicitados.

Siempre a punto. La fama del restaurante Peñalabra es de sobra merecida debido a la calidad de sus platos, al gusto en la decoración y al buen servicio en sus 28 habitaciones. Por eso, son muchos los que apuestan por este establecimiento para celebrar sus cenas de empresa ahora que se acercan las navidades. De ahí que la gerencia recomiende reservar ya su mesa para no quedarse sin sitio. Esto podrá hacerlo llamando al teléfono 979 87 00 37.

Y si lo desea puede acceder a su página web (hotelruralpenalabra.es) para descubrir su carta.