El centro expositivo Rom, ubicado en el monasterio de Santa María la Real de Aguilar de Campoo, reabre hoy sus puertas al público y lo hace con nuevas propuestas y más actividades para seguir disfrutando del patrimonio, de la historia y del románico este verano, en un entorno seguro y único.
La reapertura del museo, gestionado por la Fundación Santa María la Real, coincide con la finalización del concurso Detectives del Románico, que lanzó a través de sus redes sociales para aliviar el aislamiento y que ha contado con la participación de más de 360 personas.
«El concurso nos ha permitido seguir en contacto con el público y los visitantes durante estos meses», comenta César del Valle, coordinador del centro, para explicar que la acogida no ha podido ser mejor. Y es que, desde el 20 de marzo han participado más de 360 personas, que han rastreado pistas para descubrir algunos de los templos románicos más significativos de Castilla y León. Dieciséis de ellas se han alzado con el título de SherlockRom y ya cuentan con el diploma que les acredita como tal y con un pequeño obsequio.
maraVILLAS. José Pariente, uno de los ganadores, agradece «el regalo y el diploma» y asegura que el concurso le ha tenido entretenido durante el confinamiento. «He aprendido muchísimo del románico y he descubierto iglesias y ermitas que desconocía, también tengo ya preparadas unas cuantas rutas. Mi idea es coger el coche y mi cámara de fotos cuando todo esto se normalice y empezar a hacer kilómetros para ver in situ esas maravillas románicas», indica.
«Comentarios como este son los que han animado a reabrir el Rom y seguir demostrando que vivimos en un museo vivo, lleno de historias, en el que las piezas son las múltiples iglesias que salpican el territorio», expresa del Valle. Y es que el centro es la puerta abierta a ese territorio y, por eso, están deseando volver a mostrarlo al visitante desde la «emoción, el entretenimiento y la educación», claves que alientan las actividades del Rom.
«Hemos establecido un nuevo recorrido por el monasterio para garantizar que se guardan las distancias y hemos reducido el aforo de las salas para cumplir con los protocolos de seguridad» añade el historiador aguilarense. Además, se han instalado geles desinfectantes.