La falta de mantenimiento y limpieza es uno de los problemas más destacables del barrio de San Antonio. Además de sus calles, esta situación es extensible a sus parques. En lo que concierne al parque de la Carcavilla, arreglaron el suelo y los diferentes juegos de la zona infantil, pero lo demás deja mucho que desear. «Los bancos están de vergüenza. La gente no puede sentarse pues están indecentes por las palomas. Lo limpian hoy y al día siguiente está igual. Luego el alcalde dice que es una ciudad muy limpia y, al menos, en nuestro barrio está todo sucio», comentan los vecinos, quienes apuntan que también falta mantenimiento de los jardines. «Antes había dos jardineros, pero ahora falta personal y está todo abandonado», admite Águeda Melgar, vecina de San Antonio.
En el parque también se pueden encontrar muchas zonas en las que las losetas están levantadas tanto del suelo como de los monumentos que en él se hallan, así como paredes y escaleras rotas o agrietadas. A ello se une que los caminos de acceso al parque están sin pavimentar. «La fuente también está muy sucia y tiene alguna fuga», señalan Marta Rodríguez y Nuria Matilla, vecinas de San Antonio, para subrayar que «cuando aquí se estropea algo, así se queda».
Cabe mencionar el estado del sotechado que se reclamó en su día que se arreglase, pero que sigue sin hacerse. «Sería muy útil pues daría sombra, si bien con vegetación no tiene sentido y es conveniente buscar otra alternativa», explican.
iluminación. La poca luz existente en la zona del parque también es objeto de queja entre los vecinos. «Se necesita más iluminación en el parque en general, pero sobre todo en la zona lúdica. Hay farolas, pero no dan tanta luz y las tapan los árboles. Se podría poner alguna farola más o al menos un foco en la zona de los columpios», afirman.
No es mucho mejor el estado actual del parque de la calle Juan Antonio Bardem, anexo al pabellón municipal y al campo de fútbol, que se encuentra muy abandonado con el suelo levantado. Además, «desde ahí se puede ver una explanada hacia las pistas de pádel donde se pueden encontrar cristales, preservativos, de todo. Y ahí se bajan los niños», comentan.
instituto. No han sido pocas las ocasiones en las que los vecinos han solicitado la construcción de un instituto. «Estaría muy bien pues desde aquí les pilla un poco lejos y necesitan depender de padres, de autobuses o de más tiempo», expone Marta Rodríguez. Y Nuria Matilla hace referencia a la falta de cajeros automáticos.