El Naán es hoy en día, y no es ninguna exageración, el grupo de música palentino con mayor proyección nacional e internacional. Ayer presentó Germinal, su último disco, en la plaza Mayor. Arropados por el numerosísimo público que allí se congregó para disfrutar de su música, con las primeras notas de Tonada, El Naán y la capital saldaron cuentas pendientes.

La ciudad debía al grupo un hueco destacado en la programación de los sanantolines  -qué mejor que el día del patrono-, después de haber girado por toda España con Vetusta Morla y haber sorprendido al público con su música étnica castellana. Y El Naán debía a los palentinos gratitud por el apoyo que recibieron para publicar Germinal, ya que si está en el mercado es, en parte, porque muchos palentinos participaron en la financiación colectiva que puso en marcha el grupo.

Mujer que corre con los lobos y Los negros de Castilla, El Naán puso las bases de un concierto inspirado en culturas olvidadas pero que permanecen atadas al folclore castellano, y que este grupo palentino supo recuperar con tanto acierto.

Un espectáculo que también fue  audiovisual, que tuvo poesía y brindis, y que con temas como La Sirena, Lengua Negra, Poetas y Pastores o La llamada hipnotizó al público de la plaza Mayor con notas y letras que han colocado a Germinal y a El Naán como una referencia en la escena musical española. Ahora, es su público quien tiene una deuda.