La plaga de topillos afecta en la provincia de Palencia a 115.000 hectáreas y ha ocasionado daños por valor de 9 millones de euros. Así se desprende del informe elaborado por los servicios técnicos de Asaja Palencia que toma como referencia los seguros agrarios, las tasaciones en cultivos y las declaraciones de siniestro de los afectados.

Según este estudio, la comarca más afectada, al igual que en 2007, es Tierra de Campos. El mapa de daños revela dos grandes manchas dentro de esta comarca: una al suroeste, con 23 municipios afectados, y otra al noreste, con 13. Entre ellas quedan los pueblos con menos afección, pero elevada presencia de topillos, menos daños por las amplias zonas de regadío y por los ataques más tardíos cuando el cereal ya estaba recogido. Ambas zonas representan el 60% de la superficie de Tierra de Campos.

El informe también pone de manifiesto el daño por cultivos. Así, el que presenta un mayor grado de afección es el cereal, seguido por forrajes, alfalfa, vezas y guisantes. Menos daños ha sufrido el girasol. Del total de la superficie afectada, sólo el 44% está amparado por seguros agrarios con cobertura para los daños de fauna. Si nos referimos a los forrajes, el porcentaje baja hasta un escaso 5%. Además, la mayor parte de los deterioros no es indemnizable, dado que existe una franquicia en cada parcela afectada del 20%, lo que supone que solo las parcelas con porcentajes superiores tengan derecho a ser compensadas. 

De este informe se deduce que más del 85% de los daños no va a ser indemnizado, bien porque no se ha asegurado o porque está dentro de la franquicia del seguro. A ello hay que añadir la existencia de cultivos que tradicionalmente no se aseguran, por desconocimiento del agricultor en el caso de nuevas líneas de aseguramiento o porque no son atractivos para su contratación, como es el caso de los forrajes, la semilla de alfalfa o los cultivos hortícolas, entre otros. 

La valoración económica de las pérdidas por los daños del topillo se eleva, según este informe, a casi 9.000.000 euros, destacando los 5,8 millones en herbáceos y los 2,7 millones en forrajeros. El resto corresponde a la estimación de daños en otros cultivos como girasol, remolacha, patata o maíz. Si es grave el panorama que se presenta en Palencia en lo que respecta a las pérdidas económicas, peor es el que se refiere a los daños sanitarios, dado el avance de la tularemia que provoca la plaga de topillos, sobre todo entre agricultores y ganaderos.

 

SITUACIÓN. Asaja Palencia señala que «estamos ante una situación que nadie quería y que hemos intentado revertir con las continuas denuncias públicas desde el principio de la campaña». El problema de los topillos pone en peligro el próximo periodo agrícola cuya nueva sementera ha empezado. 

Desde este colectivo manifiestan que «es urgente tomar medidas, no basta con que la Junta anuncie que van a permitirse las quemas de rastrojos en octubre». Además indican que es preciso que arranque de inmediato el proceso para solicitar las quemas autorizadas «porque, de lo contrario, perderemos la campaña de siembra de la veza y nos exponemos a perder de igual forma la de herbáceos». Por lo tanto, desde Asaja Palencia exigen que las soluciones a través de la quema de rastrojos y tratamientos efectivos se lleven a cabo «de forma sencilla y eficaz» y se acometan «de forma inmediata» para no comprometer el futuro de la próxima cosecha y evitar repetir los errores de la pasada campaña.