La Junta de Castilla y León no reclama al Gobierno socialista "nada que no estuviéramos haciendo antes de su llegada", según explicó la consejera portavoz, Milagros Marcos, quien no obstante mostró la preocupación máxima del Gobierno autonómico por el retraso en la aprobación de los Presupuestos del Estado y el posicionamiento de la ministra de Transición Ecológica sobre la minería del carbón.

Además de la PAC, la financiación autonómica o el reto demográfico, Marcos expresó la intranquilidad de la Junta porque la falta aún de unas cuentas estatales provoca que no llegue financiación, que no se puedan subir los salarios de los funcionarios e incluso advirtió que no quedará tiempo para su ejecución si se retrasan mucho más en su aprobación. Asimismo, mostró su gran preocupación por la postura de la ministra Magdalena Valerio sobre el adelanto a 2025 del fin del carbón, una decisión que se contrapone con el acuerdo alcanzado en Europa donde se prorroga esta minería hasta 2030, lo que la consejera portavoz consideró imprescindible para realizar una transición justa que ofrezca oportunidades a los más de 2.000 trabajadores que aún dependen del carbón y de las centrales térmicas.

Tras la conversación del pasado viernes entre el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, y el del Gobierno, Pedro Sánchez, el pasado martes el jefe del Ejecutivo autonómico volvió a mantener una conversación telefónica con la ministra de Administraciones Territoriales, Meritxel Batet, con quien acordó el envío de un documento con las principales preocupaciones de la Comunidad.