La sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSCyL) ha desestimado un recurso de la Seguridad Social contra una sentencia del Juzgado de lo Social número dos de Palencia por la que concedió la incapacidad permanente a una trabajadora de una granja avícola que padeció un cáncer de mama.

En el falló del TSJ se argumenta que además de la intervención quirúrgica y el posterior tratamiento de quimioterapia, que finalizó en 2015, la paciente sufre la rotura casi completa del tendón supraespinos, situado en el hombro que, al afectar a una profesión eminentemente manual y de tipo físico debe considerarse como relevante.

A su vez, el fallo se indica que aunque la trabajadora ya no tiene ningún tumor, ello no significa que esté libre de la enfermedad que padece y que no mantenga importantes secuelas que la incapaciten para su profesión habitual de ayudante de granja avícola.

En la misma línea, el TSJ entiende que no se puede valorar el hecho aislado de que la enfermedad se encuentre en remisión y se apunta que las experiencias médicas consideran necesario un periodo de cinco años sin recaídas para considerar que en este tipo de enfermedades se ha producido la curación.