El objetivo de los independentistas es que el exconseller Jordi Turull sea investido antes de comparecer junto a otros líderes soberanistas el viernes ante el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena. El magistrado ha anunciado para ese día el procesamiento, entre otros, de Turull, lo que podría conducir a su inhabilitación si se le imputara el delito de rebelión, por lo que las fuerzas soberanistas han intensificado sus contactos para preparar una respuesta conjunta.El paso atrás anunciado ayer por Jordi Sànchez, hasta ahora candidato de JxCat a la investidura, parecía allanar el camino a Turull, pero la operación podría frustrarse si es inhabilitado antes de poder ser investido.