Apenas un año después de que se adjudicara el contrato de gestión de la guardería municipal la empresa ha optado por la cesión del mismo.

Se justifica esta decisión en los problemas de gestión que arrastra la instalación desde hace meses. Unos problemas que han sido abordados por el Consistorio, adonde han llegado las quejas de los padres de los alumnos, por el deficiente, en su opinión, funcionamiento del centro. Unas quejas a la que se suman las de los propios trabajadores, quienes no dudaron meses atrás en advertir de la posibilidad de que se llegaran a poner en peligro los empleos.

De momento, el primer paso que se ha dado ha consistido en la cesión de un contrato que conlleva la subrogación de los trabajadores con el nuevo gestor.

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