Fernando Alonso (McLaren) se resigna a la dificultad de conseguir un buen resultado este fin de semana en el Gran Premio de Italia, duodécima cita del Mundial de Fórmula Uno que se disputará en el circuito de Monza, el más rápido del calendario y donde los pilotos de Mercedes vuelven a postularse como claros candidatos al triunfo.

 Igual que hace dos semanas en Bélgica, el asturiano ha reiterado en varias ocasiones que espera una carrera «muy complicada» en Italia, donde hace no tanto tiempo competía como un ídolo para la afición local, devota de Ferrari.

El bicampeón finalizó decimotercero en Spa-Francorchamps y ahora espera un resultado similar. Además de este sombrío panorama por el difícil maridaje entre Monza y su monoplaza, podría volver a arrastrar el lastre de la sanción en parrilla si McLaren vuelve a cambiar su unidad potencia. En el equipo británico ya han dejado entrever en los últimos días que se limitarán a cerrar la gira europea de la forma más honrosa posible y que buscarán una mejora sensible de resultados con la mudanza del campeonato a Asia, sede de las siguientes pruebas.

celebrar la paternidad. En la parte delantera, Lewis Hamilton y Nico Rosberg vuelven a prometer un mano a mano por la victoria. Superado el ‘lapsus’ de Hungría, donde ambos quedaron lejos del podio por primera vez esta temporada, protagonizaron en Bélgica el séptimo doblete del año para Mercedes.

Vencedor en Spa-Francorchamps, el piloto inglés estiró hasta los 27 puntos su ventaja respecto al alemán, que correrá muy motivado estrenando su condición de padre y con ganas de dedicarle una victoria a su hija recién nacida.

 Sin embargo, Hamilton, que se ha apuntado 10 ‘poles’ en 11 pruebas y ha sumado seis triunfos frente a los tres de su compañero, sigue en un gran momento y buscará el tercer triunfo de su carrera en Monza. En caso de lograrlo, encadenaría su segundo éxito consecutivo en el trazado italiano, algo que nadie logra desde 1994, cuando repitió su compatriota Damon Hill.

 Incluso un triple campeón mundial y asesor de la escudería Mercedes como Niki Lauda ha reconocido que «en este momentos es imposible batir a Hamilton».

Por detrás, Sebastian Vettel ha vuelto a perder de vista a los pilotos de Mercedes después de su abandono en Bélgica, donde reventó un neumático de su Ferrari, lo que le agrió el gesto y abrió un cruce de acusaciones con Pirelli, de nuevo en el punto de mira como ocurrió hace dos temporadas.

Tampoco pudo acabar la última carrera Carlos Sainz (Toro Rosso), que sigue inmerso en una racha pésima y ya encadena cuatro retiradas consecutivas. Después de un buen inicio de temporada, el madrileño pierde claramente en su duelo particular a puntos con Max Verstappen (26-9) y está obligado a reaccionar cuanto antes, con el añadido de que recibirá una sanción de 10 plazas por cambiar el motor de su monoplaza.

Finalmente, el castellonense Roberto Merhi intentará volver a batir a su compañero en Manor, Will Stevens, en el circuito donde el año pasado se estrenó en el ‘gran circo’ al volante de un Caterham en la primera sesión de libres.