Un verano más negro

AGENCIAS
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Los accidentes de tráfico dejan 225 fallecidos en julio y agosto, cinco víctimas mortales más que en el mismo período de 2014, rompiendo la tendencia a la baja registrada desde 2006

Este año ha sido un mal verano en cuanto a siniestralidad vial se refiere, ya que un total de 225 personas perdieron la vida en las carreteras durante la Operación Verano, desplegada por la Dirección General de Tráfico (DGT) en julio y agosto, lo que representa un aumento del 2 por ciento (cinco fallecidos más) respecto al mismo período de 2014, según señaló ayer la directora general de Tráfico, María Seguí, durante la presentación del balance de siniestralidad estival.

Con esta cifra se invierte la tendencia a la baja en cuanto a decesos que se venía registrando desde el año 2006.

Pese a que este dato supone cinco víctimas mortales más, Seguí quiso puntualizar que, hasta las 24 horas del 2 de septiembre, se llevan contabilizados 727 fallecidos, 16 menos que en 2014, lo que supone un descenso del 2 por ciento en comparación con 2014.

Seguí explicó que España «está en un momento adverso y de peligro», al igual que otros países del entorno, donde también se están produciendo repuntes en la mortalidad en las carreteras. No obstante, señaló que se trata de una situación que tiene margen de mejora y que «en ningún caso» supone haber tocado fondo. «Que nadie tire la toalla, seguimos aspirando a cero víctimas mortales», resaltó.

Por meses, hubo seis fallecidos más en julio y uno menos en agosto. En concreto, en el séptimo mes del año se produjeron 104 accidentes mortales en los que murieron 113 personas, mientras que en agosto hubo 96 accidentes con 112 decesos. En cuanto a la movilidad, en estos dos meses se produjeron 81,1 millones de desplazamientos de largo recorrido, lo que supone un aumento del 3,4 por ciento.

Por comunidades, los mayores incrementos se registraron en Cataluña (con 19 víctimas mortales más, un 20 por ciento) y País Vasco (con 19 más), mientras que en el resto hubo 54 menos, lo que supone un descenso del 8,5 por ciento.

Tramos peligrosos.

Seguí también señaló que el 27 por ciento de los fallecidos perdieron la vida en tramos de especial peligrosidad identificados por Tráfico. Precisamente, el estado de las carreteras fue otro de los puntos que la responsable de la DGT abordó, remarcando que «influye» en la mortalidad, si bien este órgano «no tiene competencia en esa materia» para intervenir.

«No podemos hacer nada, es propiedad de otros, aunque sí que vigilamos constantemente la afectación que tiene y remitimos de manera periódica comunicaciones a los titulares.