132 millones de desheredados

SPC
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La ONU auxiliará el próximo año a siete de cada 10 personas que requieran ayuda humanitaria, la mayoría afectadas por conflictos armados, para lo que pedirá 22.000 millones de dólares

132 millones de desheredados

Los conflictos y las catástrofes naturales dejarán el año próximo a 132 millones de personas dependientes de la ayuda humanitaria, según  aseguró ayer el coordinador de Emergencia de Naciones Unidas (ONU), Mark Lowcock, quien presentó el documento Resumen Humanitario Mundial.

En las regiones más afectadas del planeta casi 94 millones de personas necesitarán ayuda de las organizaciones de la ONU, desde vivienda a alimentos, medicinas y escuelas de urgencia. 

A fin de lograr este objetivo, la organización lanzó un llamamiento por 21.900 millones de dólares con los que busca cubrir las necesidades humanitarias de 93,6 millones de personas en todo el mundo -siete de cada 10 que requiere auxilio-, la mayoría de ellas afectadas por conflictos que se prolongan en el tiempo. A falta de incluir la petición concreta para Siria, la ONU vaticina que el llamamiento final rondará los 25.000 millones. 

«La ayuda humanitaria no puede sustituir a las soluciones políticas a largo plazo y la colaboración que esperan con tanta  desesperación los necesitados», destacó Lowcock. 

«En 2019, casi 132 millones de personas necesitarán asistencia humanitaria y protección, la mayoría por el impacto de conflictos. Naciones Unidas y la organizaciones aliadas buscan ayudar a 94 millones de personas», explicó Lowcock, que resaltó que una de cada 70 personas en el mundo está atrapada en una crisis. 

«Pero la ayuda humanitaria no puede reemplazar soluciones políticas y de desarrollo a largo plazo que la gente en situaciones de crisis tan desesperadamente ansía», advirtió, y añadió que desde la ONU se trabajará para «movilizar la voluntad, las capacidades y la creatividad de la comunidad mundial para poner fin a las crisis y promover el desarrollo que ayude a la gente a ser más resiliente ante las que no se pueden evitar». 

Está previsto invertir 4.000 millones de dólares en Yemen y 3.000 en Siria, que son los territorios más afectados, además de otras zonas calientes como Afganistán, República Centroafricana, Sudán del Sur y Somalia.