Guardo prometió organizar la Navidad más cultural de la provincia. Y cumplió. Lo hizo con creces, superando todas las expectativas en cuanto al número de asistentes y a los actos programados, que van en aumento año tras año, hasta rozar el medio centenar de propuestas a pie de calle desde el pasado mes de diciembre. Unas cifras de récord que hicieron de la localidad minera un destino obligado para despedir 2018 y dar la bienvenida al nuevo año.
Gran parte del éxito se debió, como reconocieron ayer desde el propio Consistorio, a la colaboración vecinal. Guardenses que se volcaron con una programación «completa y variada, pensada para todos los públicos», afirmó la concejala de Festejos, María José García.
Uno de los colectivos más implicados en la programación fue la AMGu, que contabilizó más de 3.000 personas en las diferentes actividades que programó durante las últimas tres semanas.