De manera sencilla y entre familiares, amigos y vecinos, se homenajeó ayer en Barruelo de Santullán a uno de sus hijos más ilustres, el pintor Ambrosio Ortega, Brosio, que falleció el pasado 14  de julio.

El Ayuntamiento de su localidad natal, a través de la Concejalía de Cultura, quiso rendirle tributo con un pequeño acto denominado Palabras para Brosio que se desarrolló en la Casa del Pueblo barruelana. Un emotivo evento en el que además de la concejala de Cultura, Maribel Martínez; varios «camaradas» del que fuera el primer secretario provincial del Partido Comunista, como recordaron Antonio Herreros y Mariano San Martín; además de familiares como Iván Alonso, y amigos  como Julián Alonso y Javier Castrillo, le dedicaron unas palabras, poesías, además de una canción. Incluso una funcionaria de prisiones leyó unas emotivas frases de sus compañeros en la cárcel.

También asistió su hija Rosana que agradeció el cariño de la localidad norteña por su progenitor, cuyas cenizas por la mañana habían depositado en la sierra de Santullán-La Braña -como era su deseo-.

Bonita acción dedicada al pintor de los mineros que además tuvo continuidad con el descubrimiento de una placa. Y es que el Consistorio le ha dedicado el espacio que hay entre el Ademar y el Auditorio. La conocida como Plaza del Centro de Salud, se denominará ahora Plaza del pintor Brosio.  El Coro Rubagón puso el broche de oro a la jornada con el Himno a Barruelo.

Brosio, está considerado como uno de los mejores acuarelistas de nuestro país y uno de los artistas que mejor ha sabido plasmar en sus obras el trabajo de minero, profesión que ejerció. Nacido en Barruelo en 1925, pasó casi 24 años en diferentes cárceles, convirtiéndose en el español que más tiempo estuvo en prisión por motivos políticos. Parte de su extraordinaria obra se pudo ver ayer en Barruelo a través de varios audiovisuales.